Con el trofeo que le acredita como número uno del tenis mundial
Muguruza es la 24ª reina de la clasificación WTA. Venezolana de nacimiento y vasca por parte de padre eibarrés, Garbiñe acumula cinco títulos WTA en su carrera: Hobart (2014), Pekín (2015), Roland Garros (2016) y Wimbledon y Cincinnati (2017).
Muguruza posa en París tras ganar Roland Garros
Esta guerrera, mitad vasca, mitad venezolana, es tozuda, competitiva y muy apasionada del tenis. Desde pequeña siempre quiso ser profesional de este deporte y vaya si lo ha conseguido. No tiene límites. Su físico es un gran aliado para golpear la pelota de forma precisa y agresiva. No hay obstáculo en el camino que intimide a esta mujer de 1,82 metros de estatura.
La tenista es muy competitiva
La número uno del tenis femenino mundial ha desbancado además a Sharapova como rostro favorito de las marcas publicitarias. Son muchas las que están interesadas en que la tenista ponga cara a sus negocios. Adidas se encarga de vestirla en pista y Babolat la nutre de material deportivo. La tenista se motiva con música de David Guetta, va al cine de vez en cuando, devora series y películas y le encanta la moda.
Según publica el diario El Mundo, Muguruza atesora casi 13 millones de euros, teniendo en cuenta la suma de los premios y las clasificaciones del ranking WTA. Solo su victoria en el torneo de Wimbledon le hizo embolsarse más de dos millones de euros.
Garbiñe Muguruza en Wimbledon
Así las cosas, la tenista tributa en Suiza su fortuna para evitar el pago de impuestos. Solo necesita demostrar que reside al menos 180 días fuera de España. Ya pagamos tú y yo. ¡Claro que sí, guapi!