Kimi Raikkonen, confía en luchar por la punta a partir del Gran Premio de China, al mismo tiempo, el finés se defiende de las críticas tras el GP de Australia, argumentando que pudo haber sido más rápido.
Según lo visto en Melbourne, Ferrari y Mercedes son los equipos dominadores de la F1 actual, por lo que es lógico pensar que Kimi Raikkonen, segundo piloto del conjunto italiano, luche en la parte más alta de la clasificación.
Räikkönen se clasificó cuarto en Australia, casi a un segundo de la pole position, y a más de medio segundo de su compañero de equipo, Vettel, y el domingo que terminó la carrera a 22 segundos de la victoria. Respecto a los problemas que se le presentaron en el GP de australia, Raikkonen comentó: "Comprendimos un poco, pero todo llegó un poco tarde".
"No obtuvimos un resultado muy bueno, pero comparado con el último par de años estaba lejos de ser un desastre. Tuvimos algunas dificultades y sabíamos [después del fin de semana] que podríamos haber sido mucho más rápidos, pero como equipo hicimos un trabajo bastante sólido, y conseguimos algunos puntos. Ahora es un nuevo lugar, un nuevo circuito, así que vamos a ver", argumentó.
Respecto al equipo que dominará la carrera en China, Kimi no ha querido emitir juicios. "No hemos conducido una sola vuelta con los coches nuevos aquí, así que ¿quién sabe?", añadió Räikkönen.
"Creo que tenemos un paquete muy bueno, y nos sentimos bien con el coche, cualquiera que sea el lugar en que hemos estado, pero es inútil empezar a adivinar quién va a estar en el frente y quién no", especificó.
La lluvia es actualmente una amenaza en los tres días del GP, y Räikkönen espera que el SF70H de Ferrari afronte las condiciones climáticas. "Tenemos diferentes neumáticos aquí para la pista húmeda, por lo que es un poco desconocido, pero es igual para todos", dijo.
"Por lo general, si el coche es bueno en el seco, entonces no está mal en el húmedo tampoco.Tendremos que esperar y ver, pero creo que en cualquier condición debemos estar bastante bien", puntualizó.