¿Sabías que la idea de celebrar un día dedicado a los libros surgió del escritor valenciano Vicent Clavel Andrés? Pues sí, fue quien lo propuso a la Cámara Oficial del Libro de Barcelona, ciudad donde vivía.
¿Y por qué celebrarlo el 23 de abril y no cualquier otro día? Inicialmente se celebraba el 7 de octubre, pero en 1930 se decidió cambiar a esta fecha por dos motivos. Primero porque en primavera hacía mejor tiempo para este tipo de eventos y, en segundo lugar, porque esta fecha tiene mucha importancia literaria, ya que coinciden el nacimiento o fallecimiento de personalidades como Miguel de Cervantes, William Shakespeare, Garcilaso de la Vega, Josep Pla, George Steiner, Edgar Neville, entre otros.
En la actualidad, se celebra a nivel mundial y con el objetivo de fomentar la cultura, la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor.
En este día también se celebra San Jorge o Sant Jordi, patrón de Aragón y Cataluña así como de países como Alemania, Bulgaria, Grecia, Inglaterra, Portugal, entre otros.
En esta festividad es costumbre regalar a las personas queridas una rosa y un libro.
Cuando trabajaba en GE, mi compañero Graham me solían regalar una rosa de chocolate cada año para este día. En mi empresa actual, desde Barcelona, donde se celebra San Jordi cada año nos suelen mandar un libro o una rosa, depende de la ocasión. Monsieur Accidents casi siempre me suele regalar una flor y yo a él un libro, aunque este año he recibido ambos regalos.
Y tú, ¿sueles celebrar este día? ¿Regalas o recibes la rosa y el libro?
¡Feliz San Jordi! ¡Feliz Día Mundial del Libro!
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