Y como una de las formas más seguras de ejercicio para las futuras mamás, lo hacen la mejor opción cuando estás esperando.
Estos son los beneficios de nadar durante el embarazo:
Nadar es amable con tu cuerpo. Si estás embarazada, es probable que tu vida sea cada vez más complicada, así que si tienes poco tiempo y quieres simplificar tu rutina de ejercicios para centrarte en un deporte que aumente tu estado físico general, el nado cumple todos los requisitos. Proporciona un entrenamiento de cuerpo completo que utiliza todos los principales grupos musculares, la construcción de fuerza, potencia y flexibilidad. Aumenta tu resistencia y tu capacidad de recuperación y fortalece tu corazón. ¡Justo lo que recetó el doctor!
Nadar ayuda a tus articulaciones y ligamentos. Durante el embarazo, tu cuerpo produce una hormona llamada relaxina que relaja los ligamentos para permitir que el útero y la pelvis se expandan. También permite a las arterias acomodar un mayor volumen de sangre y aflojar el sistema musculo esquelético, lo que resulta en articulaciones más flexibles y una mayor curvatura de la columna vertebral. La natación es un deporte de bajo impacto, por lo que se minimiza el riesgo de esguinces y otras lesiones. La flotabilidad del agua también disminuye la tensión en tu espalda.
La natación puede aliviar las náuseas. Cada embarazo es diferente, y cada mujer embarazada tiene sus propios consejos favoritos para mantener las náuseas al margen, pero muchas mujeres que sufren de náuseas matutinas informan que la natación proporciona alivio. Cualquiera que sea la razón, ya sea simplemente como resultado de los beneficios generales para la salud proporcionados por el ejercicio, o si hay una respuesta fisiológica más específica al movimiento en sí o la sensación de relajación que conlleva el agua, hay algo sobre la natación que parece ayudar a muchas mujeres a sentirse mejor.
En resumen, la natación ayudará a que tú y tu bebé estén más sanos y felices. ¡Es el deporte perfecto para futuras mamás!