1.- Valle de Guadalupe
Vas por el vino y te quedas por los tacos. El Valle de Guadalupe es un destino que ningún foodie se puede perder, ya que en los últimos años su gastronomía ha tenido un boom de todo tipo de restaurantes: cocina del mar, cocina del campo a la mesa, comida callejera y food trucks. Aquí hay algo para todos. (Y claro, también hay vino para todos)
Donde se quedan los foodies: Un hotel culinario de solo tres habitaciones, Finca La Divina, a cargo del chef Javier Plascencia de la Finca Altozano (y a solo 10 kms del restaurante) es el lugar perfecto para comenzar tu recorrido de vino y comida.
Habitaciones bajo pedido en Finca La divina
2.- Puebla
Si eres amante del mole, esta es una de las escapadas gourmet que tiene que estar a la cabeza de tu lista. Ya sea con pollo, mole, cerdo, tortillas o simplemente a cucharadas, Puebla es la parada obligatoria para descubrir esta salsa en toda su gloria. Si quieres explorar más allá de la ciudad, no dejes de visitar Chipilo, una comunidad fundada por italianos donde la crema, el queso y la pasta son un must, y agrégale un toque histórico con una visita rápida a Cholula.
Donde se quedan los foodies: Casa Reyna. Además de ser un ícono de la cocina poblana por sus platillos tradicionales (y su mole!), es el hotel boutique perfecto para explorar el centro de la ciudad.
Habitaciones dobles desde ¢1,427 MXN en casareyna.com
3.- Oaxaca
Tlayudas, chapulines, quesillo, moles de hasta 20 ingredientes, maíces de todos colores, hoja santa…los sabores por descubrir en Oaxaca son interminables. Esta escapada gourmet también es obligatoria. Recorre los mercados por el día y los restaurantes por la tarde, y si aún te sobra tiempo agrega a una visita a Hierve el Agua. (Hay que ganarse las tlayudas!)
Donde se quedan los foodies: Casa Oaxaca. Cuenta con el restaurante del mismo nombre a cargo del chef Alejandro Ruiz a unos cuantos metros de tu habitación.
Habitaciones sobre demanda en Casa Oaxaca
Imagen: Restaurante Criollo
4.- Mérida
El sureste de México no carece de atractivos turísticos, pero cuando se trata de comer bien una de las primeras paradas debe ser Mérida. Ya sea que vayas sólo por el fin de semana o de camino a alguna playa, la capital yucateca es el lugar ideal para disfrutar de su platillo estrella: la cochinita pibil. Complementa esta delicia con otros platillos típicos de la región, como los panuchos, papadzules, pescado adobado, salbutes y por supuesto un buen ceviche.
Donde se quedan los foodies: Hacienda Xcanatún. Aunque no esta en el centro de la ciudad (está a 15 minutos), esta hacienda cuidadosamente restaurada es hogar del famoso restaurante Casa de Piedra, uno de los mejores 50 restaurantes de México según 50 best.
Habitaciones dobles desde $260 USD en Hacienda Xcanatún
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