EL EGO

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Hay personas que con sus actitudes o decisiones te pueden hacer sentir mal.

A menudo, algunas decisiones de las personas con las que guardamos algún afecto nos "duelen" cuando no van de acuerdo a los planes o metas trazadas en común. Si, hablo de una relación de pareja.

Bien, a veces, o mejor decir, casi siempre es mejor hacerse a un lado y no estorbar: dejar que la vida fluya.

Es curioso, como de repente comenzamos a mirar mas claro sobre ciertas emociones y como nos afectan.

Y particularmente (hablo de mi), he observado que aquel cliché "me rompió el corazón", no es mas que el reflejo a un golpe en el ego.

Esa persona confrontó con su decisión a nuestro ego, el cual se ve lastimado o dolido.

Ahora, la buena pregunta: como saber que es el ego el protagonista de este "dolor" y no el "corazón roto"?

Aquí algunas sugerencias, desde mi humilde experiencia:

1. Hazte a un lado. Si, vuelvo a repetirlo porque es lo mejor que puedes hacer. Deja que fluya. Deja que la circunstancia siga su ritmo. No la obstaculices ni mucho menos la trates de detener con episodios mas ridículos que dramáticos.

2. Mira en perspectiva. Salte del escenario. Deja de ser protagonista y mira desde afuera. Veras que, quizás después de todo, el escenario que te han dejado tampoco pinta tan mal.

3. Madura. Es difícil porque algunas personas creen que la madurez va atada a la edad cronológica y no creo que esto sea así. A veces no hay la madurez suficiente para ciertos eventos en la vida, tengas la edad que tengas.

4. Míralo como una oportunidad. Es tu gran oportunidad de teclear sentimientos desde perspectiva y ver si eran reales, leales y perdurables. Hay pasiones que confunden.

5. Acepta que hay cosas que no puedes controlar. Lo único que puedes, y debes controlar es tu reacción y tus emociones. El resto no esta bajo tu control y esta realidad no la puedes cambiar.

Cuando por fin comprendes (ese momento va llegar, créeme) que es tu ego el que esta dominando la situación debes hacer todo lo posible por quitarle poder. Desde la humildad. Desde el alma. Saber que no todo es personal y que no todo, o todos, deben estar disponibles para darnos valor a nosotros mismos como personas.

Hay que deponer el ego. Y tratar de ir mas hacia el alma, a la esencia de lo que somos.

Dayana M.