Hay cosas que dejan de ser divertidas y pasan a ser hirientes. Las bromas y burlas hasta cierto punto son formas de socializar, que generalmente se perciben como amigables, neutrales o negativas. Pueden tomar varias formas, desde juguetonas y joviales hasta degradantes, hirientes, odiosas y abusivas. Por esta razón, resulta vital saber dónde y cuándo trazar la línea, es decir, en qué momento dejar de molestar para que la burla no pase a mayores.
Burla
La forma más común de burlarse o hacer bromas sobre las cosas es de manera verbal. Pueden llegar a ser divertidas cuando la gente se ríe y se divierte, pero podrían convertirse en algo cruel y doloroso cuando las personas “se divierten con las otras”; es decir, cuando se “burlan de las demás”.
Cuando se hacen de manera sana, las bromas y burlas fomentan el acercamiento entre personas y son una excelente forma de “romper el hielo”.
Acoso
Como ya se dijo anteriormente, cuando el juego se vuelve ofensivo y además de eso; se hace de manera frecuente, estamos hablando de acoso.
En las escuelas es muy común que se dé el acoso hacia personas con discapacidades, por cuestiones de religión, color de la piel, preferencias sexuales…
El bullying o acoso es una práctica muy extendida, en la cual una persona sin ningún motivo o finalidad; hace daño regularmente a otra u otras. Consiste en el uso de amenaza, fuerza e intimidación para imponerse agresivamente sobre los demás. Generalmente, el acoso ocurre de manera verbal e incluye insultos de diferentes tipos.
Algunos expertos ven la diferencia entre burlas y acoso escolar como una cuestión de grado. La intimidación a menudo comienza con burlas suaves, pero una vez que el bravucón encuentra un blanco vulnerable; se intensifican y se vuelven más ofensivas y persistentes.
Diferencias clave entre acoso y burla
La burla se hace de manera juguetona e incocente, además, las personas no se sienten profundamente ofendidas. Por otra parte, el acoso es una práctica recurrente que consiste en bromas y burlas pesadas.
La burla generalmente tiene una intensión amigable, mientras que el acoso suele ser muy agresivo.
La burla puede ayudar a estrechar relaciones, mientras que el acoso es perjudicial para la víctima tanto física como emocionalmente.
La burla puede considerarse como buena, neutral o negativa, mientras que el acoso siempre se considera negativo.
Diferencia entre burla y acoso - Diferencia entre cosas similares.
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