Cabe decir, que si bien cuesta de vez en cuando entender quién está haciendo qué y porqué, nada parece improvisado, y se agradece que no hayan alargado innecesariamente una trama que sus responsables tenían muy bien estudiada y orientada para no dejar de sorprendernos. Aún así, algunos cabos secundarios quedan un poco sueltos, pero la idea general de lo que nos querían contar, aunque nos hayamos perdido por el camino, queda bien cerrada y explicada en sus dos magistrales episodios finales. Por supuesto, los aspectos técnicos e interpretativos son cuanto menos impresionantes, con una ambientación orgánica que ayuda muchísimo para situarnos espaciotemporalmente, y unas actuaciones muy exigentes de un reparto que debe hacer malabares para plasmar con credibilidad las diferentes personalidades, momentos o edades de un mismo personaje.
Una serie única en forma y contenido que crea un mundo tan complejo y estimulante que consigue atraparte desde el primer instante bombardeando tu mente en lugares y formas que no sabías ni que existían.
Mi puntuación Temporadas 2 y 3: 7/10
Mi puntuación Serie completa: 8/10