McLaren pretende hacer que Woking, la ciudad en donde ahora mismo se encuentra su sede, se una a Mónaco y Singapour para albergar otro GP en medio de la población, un plan que muchos se lo toman a modo de broma, pero los ingleses parecen estar tomándoselo muy enserio
El circuito, cuyo nombre sería Autódromo Internacional de Woking,, constaría de casi 5 Km y 18 curvas, dimensiones muy parecidas a las del circuito de Melbourne en Australia.
Desde Autosport.com, recogemos las declaraciones del director de operaciones de McLaren, Jonathan Neale: "¿Por qué no llevar la Fórmula 1 a las calles de Woking?
"Obviamente, aparte del enorme compromiso social y financiero necesario para establecer la infraestructura, replantear las carreteras, volver a colocar Tarmac, montar millas de Armco, construir tribunas, pagar por los honorarios de alojamiento de la carrera y obtener la aprobación y la aprobación de La FIA, no vemos ninguna barrera a nuestra visión ".
McLaren agregó que la velocidad máxima proyectada en el circuito sería de 195 mph, afirmando que esto sería "para los coches delanteros". El director ejecutivo de McLaren, Zak Brown, dijo que el plan evocó recuerdos de la carrera de Mika Hakkinen por la ciudad para celebrar su primer campeonato mundial en 1998.
"Fue Mika quien primero corrió un Fórmula 1 por las calles de Woking, en 1998", dijo. "Ese evento encendió una chispa que inició un incendio que se convirtió en un sueño que convertimos en una idea: acoger una ronda del campeonato mundial de Fórmula 1 en nuestra puerta, en Woking. Nuestros ingenieros, nuestros mecánicos, nuestros estrategas han conducido realmente esta pista. De hecho, lo han vivido, lo que realmente les da una ventaja sobre el resto de la parrilla. Ese es el tipo de ventaja que no puedes comprar ..."
El diseño del circuito propuesto "aprovecha al máximo las calles sinuosas del mercado y las carreteras rápidas" y pasa dos de las antiguas localizaciones de la fábrica de McLaren.
El plan de McLaren también incluye ideas tales como basar el paddock en pontones flotantes anclados a lo largo del canal de Woking-Basingstoke, y tener a periodistas trabajando en hotspots con wifi en cafés locales, restaurantes y centros comerciales en vez de un centro de los medios.