La novela se centra en la vida de una adolescente judía que se ve obligada a exiliarse a Londres ante la amenaza del nazismo incipiente de la época en Alemania. Tras llegar a la popular estación de Liverpool Street en uno de esos trenes cargados de niños judíos, Ziska se encuentra sola, sin su familia a la que tratará de volver a ver por todos sus medios. Hasta ese momento, la protagonista se ve obligada a vivir una vida paralela a la suya que más tarde le provocará una serie de dilemas vitales ante los que deberá decidir.
La obra, maneja hábilmente una trama intensa, emocionante y profunda que va más allá del trastorno que supone el exilio para la joven y se adentra en el terreno más personal de la vida de cualquier adolescente, mezclando aventuras, amor y drama a partes iguales, y atrapando al lector hasta los últimos renglones.