1. Piensan que todo lo ves de color
No señores, de manera simple se puede explicar que percibimos las imágenes a través de la pupila y no del iris, el iris es el que cambia de color de una persona a otra así que sin importar si los ojos son verdes o cafés las imágenes y la información que percibimos de éstas es bastante parecida.
2. Siempre te preguntan si usas lentillas
Nunca he entendido esta pregunta, hasta la fecha no he encontrado lentillas que de verdad imiten el color y diseño de unos ojos naturales, es obvio, ¿no?
3. Todos quieren ver tus ojos
A ver, ¡voltea! No importa qué tan incómoda te sientas o qué tan ajena sea la otra persona, todos quieren ver tus ojos aun invadiendo tu espacio personal.
4. Siempre escuchas la frase: “¿me los regalas?”
¡No! La respuesta es ¡No!
5. O la historia de cómo tus color de ojos es una anomalía genética
En primer lugar no es algo nuevo que escuchar y en segundo lugar, no importa las mil excusas que de manera desesperada esa persona nos quiera dar, la verdad es que anomalía o no, los ojos claros son hermosos.
6. Te piden ser la madre de sus hijos
Sin importar la herencia que la otra parte pueda aportar, hay personas que cargan toda la responsabilidad genética a quien tiene ojos claros (como si eso se pudiera elegir).
7. Preguntan si son de verdad
Perdón ¿cómo dices?…
8. Te ponen apodos raros
Y bueno, la verdad es que en este mundo cruel hasta algo lindo puede convertirse en un martirio, lo bueno es que esto generalmente ocurre mientras cursas la escuela y encuentras tu identidad para después solo arrancar suspiros.
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