Ya sabéis lo que me gustan a mí las celebraciones, así que, ¡¡cómo no voy a celebrar este día!!
La semana pasada vino a verme mi amiga Carmen que me trajo un regalo ya que para mi santo no me iba a ver.
¿Qué os parece? A mí me encantó. Gracias Carmen por este detallazo!! Lo estrenaré cocinando contigo.
Cuando nací, mis padres pensaron en llamarme Esperanza, al nacer el día de la esperanza, pero a mis abuelas no les sentaron muy bien. La tradición en el pueblo es que a tus hijos les pongas los nombres de sus abuelos, así que me tuvieron que llamar María por mi abuela paterna y Dolores por mi abuela materna. Y no me quedaba otra que celebrar los dos santos, que pena, no?
Me gusta que mi santo no sea un día fijo y que siempre sea viernes, es un día perfecto ya que es el comienzo del fin de semana y de la Semana Santa. Y para fijo y tengo el día de las Marías, que es el 12 de septiembre.
Hoy lo celebraré con una cena romántica con Juanlu que ya ha vuelto de Alemania. La verdad es que no me gusta cuando pasa tanto tiempo fuera de casa, pero al menos me trae regalos y está en casa para celebrar mi santo.
¿Y vosotros, celebráis vuestros santos?