Chica contando algo
Lo que no contamos suele estar mal visto ética y socialmente, no lo revelamos por vergüenza. Aquí hablaríamos de una infidelidad, del aborto o diferentes gustos sexuales.
Los investigadores clasifican los secretos en 38 categorías: aborto y embarazos, actos ilegales, comportamientos inusuales y/o sexuales, creencias o ideologías, datos o hechos familiares, descontento social, empleo, finanzas, hobbies, traiciones, traumas, trampas en el trabajo... Además, según este estudio, el 60% de las personas oculta una mentira o impropiedad financiera, un 47% esconde una traición de confianza, mientras que un 33% esconde un robo, una relación oculta o un descontento laboral.
Niña contando un secreto
Para que el peso del secreto no sea tan insoportable hay dos opciones: revelarlo o esperar a que se descubra solo. ¿Algo que confesar? Hasta los niños guardan sus secretos y es alrededor de los 6 años cuando empiezan a ser más discretos.