Sebastian Vettel culminó con la sequía de victorias que Ferrari tenía desde el GP de Singapur 2015, y Sergio Marchionne, presidente de la Scuderia, ha reaccioado con asombro tras haber derrotado a las flechas de plata en igualdad de condiciones.
La estrategia fue clave, y Vettel se mantuvo al frente mientras que Hamilton lidiaba con Verstappen, de este modo, el alemán pudo desprenderse en la punta.
Kimi Räikkönen, tuvo una carrera solitaria en la cuarta posición con el otro SF70H, asegurando que Ferrari ascendiera a la parte alta de la clasificación general de constructores por primera vez en la era híbrida.
"Ya era hora", dijo Marchionne. "Estoy encantado por el equipo y por nuestros Tifosi que estuvieron a nuestro lado durante todo este período, hemos estado esperando esta victoria por casi un año y medio. Oír de nuevo el himno nacional italiano fue muy conmovedor. Sebastián tuvo una gran carrera y estoy seguro de que Kimi estará pronto luchando junto a su compañero de equipo. Por supuesto, esta victoria es algo para compartir con todo el equipo, tanto en el circuito como en Maranello, porque el trabajo en equipo es la única manera de lograr grandes objetivos".
Marchionne dejó claro, sin embargo, que Ferrari debe seguir empujando. "Es absolutamente esencial recordar que este no es el destino sino el primer paso en un largo camino que debe vernos todos enfocados en mejorar cada día", subrayó.
Marchionne también felicitó al piloto de reserva Antonio Giovinazzi, quien hizo su debut en lugar de Pascal Wehrlein en Sauber, cruzando la línea en el 12º.
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