tiempo más que suficiente para visitar El inconfundible Muelle de Santa Mónica (el final de la Ruta 66, la legendaria carretera que cruza en diagonal Estados Unidos desde Chicago hasta aquí) con su paseo repleto de juegos y atracciones (sin olvidarme de la noria y la pequeña montaña rusa de su añejo parque), muy próximo a nuestro hotel que, sin duda, recordaréis porque es el lugar al que "Forrest Gump" llega corriendo y da la vuelta hasta llegar al otro océano (y así durante tres años, dos meses, 14 días y 16 horas) en la mítica película de 1994. Aquí comí uno de los mejores burritos que jamás había probado en mi vida.
Vestido gasa plisado: Sheinside (aquí).
Saldalias: Bianca Moon (Calzados Foces).
Torera denim: Mango.
Gafas: Backflip (Navarro Óptico).
Sandalias: Bianca Moon (Calzados Foces).
Pulsera: Eva Vidal.
Debido a su benigno clima, Santa Mónica se ha convertido en una famosa ciudad de vacaciones desde principios del siglo XX. La ciudad ha sufrido un boom desde finales de los años 80 a través de la revitalización de su centro, un significativo aumento laboral y el incremento del turismo.
Sus casetas para los socorristas, popularizadas por la serie de televisión "Los vigilantes de la playa", son quizá uno de los iconos más reconocidos, junto con los todoterreno amarillos con la leyenda "Lifeguard" aparcados frente a la central de salvamento.
Camiseta Lady Gaga: Pantai Gijón.
Bikini rayas: Motufashion (aquí).
Gafas: Hartford (Navarro Óptico).
Mono: Motufashion (aquí).
Torera denim: Mango.
Sandalias: Bianca Moon (Calzados Foces).
Gafas: Hartford (Navarro Óptico).
Además de El Muelle y, por supuesto, de la playa, cómo no, destacaría El Santa Monica Promenade, un camino de tiendas, cafés, cines y restaurantes (La única calle grande que es completamente peatonal).
También me gustó mucho el aire bohemio que se respiraba en Venice Beach, mucho más underground. El sector conocido como la Playa de Venice (un espectáculo diario) incluye la playa, el colorido paseo paralelo a ésta (en el que se pueden encontrar un sinfín de músicos y artistas callejeros),
la playa conocida como la Muscle Beach (donde siempre podemos ver culturistas entrenando mientras el sol del atardecer ilumina su anatomía),
un patio de juegos abiertos en una zona que incluye las canchas de balonceso y volley, la plaza Skate Dancing, las pistas para ciclistas y las tiendas y residencias que tienen sus direcciones frente al océano.
Camiseta: Tienda local.
Shorts: Venca.
Sandalias: Bianca Moon (Calzados Foces).
Gafas: Hartford (Navarro Óptico).
Por último, también me impresionó lo que puede ver (ya que la mayor parte es residencial) de las playas arenosas de Malibú a lo largo de la línea de la costa Pacífica.
Y a vosotras,
¿no os parece que la cara más estival de Los Ángeles ofrece al viajero un soplo de aire fresco?