Disco Resiliencia
En este disco, Diana Navarro muestra un álbum de pop electrónico con un montón de matices, pero sin perder aquellos detalles tan únicos como el flamenco, la saeta, la copla, la zarzuela y la lírica.
A excepción de dos temas, todas las canciones de este disco han sido fruto de la inspiración personal de la artísta. Carlos Vera, Paco Salazar e Iñaki Garcia también han colaborado en este nuevo trabajo. Domi del Postigo, Antonio Martínez Ares, y José Manuel Navarro han colaborado en las letras. El single de este nuevo disco es Ni siquiera nos quedó París.
En el disco Resiliencia puedes escuchar las siguientes canciones: “Angelito de canela”, “El perdón”, “Yo me voy a querer”, “Eres tú”, “Haz conmigo lo que quieras”, “Los niños, no”, “La revolución del amor sincero”, “Olivia Ovidia”, “Que sí, que sí, que sí”, “Ni siquiera nos quedó París”, “Desnuda vengo aquí”, “Me amo y me acepto completamente” y “La reina de Occidente”.
La música y la resiliencia son dos conceptos que a nivel general, están más unidos de lo que parece a simple vista: una melodía puede elevar el estado de ánimo, potenciar la introspección, ofrecer consuelo, inspirar emociones, enviar un mensaje de ánimo, dar calor humano y conectar con recuerdos de vida. La música tiene incluso un poder terapéutico como muestra el efecto de la musicoterapia.
Canción Ni siquiera nos quedó París
Haciendo un juego de palabras con esa frase romántica que dice “siempre nos quedará París”, el título de esta canción te sumerge en un universo de sensaciones, abrazos y emociones. Canciones que hablan de historias de la vida, relatos llenos de resiliencia, superación personal, fuerza de voluntad y capacidad de abrir nuevas puertas allí donde se cierran las ilusiones.
Diana Navarro, una voz con mucha personalidad y sensibilidad.
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