Horacio Quiroga
Como siempre quiero dar un enorme gracias a la Editorial Vicens Vives que me reparte mi dosis mensual de adicción a la lectura.
"Yo, Rajá, tigre real de Bengala, voy a contar en lenguaje humano cómo me vengué de mi dueño, el domador Kimberley, que me amansó."
Así da comienzo esta lectura que es a la vez un grito de socorro y una lección a los humanos para cuidar la biodiversidad. Interesante, ¿verdad? pues bien, yo he decidido hacer lo mismo y redactar mi reseña en el lenguaje de los tigres: grrrrraaaarrrrhhhh gggggrrrrr grrraaaarrrrggg...
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...¿de verdad pensábais que iba a redactarlo todo en la lengua tigresa? lo siento, lectores, la ley de la jungla me lo tiene prohibido.
Rajá es uno de esos animales desafortunados que, arrancado de las patas de su madre, es ofrecido a un circo como un espectáculo lamentable. Y podríais pensar que esta historia es actual pero os daré un dato curioso, el creador de este relato murió en el año 1937, es decir, que ya hacía muchísimos años, el ser humano se estaba dando cuenta de algunas de las cosas que no hacemos del todo bien.
Siempre se han asociado palabras como: cruel, fiero, salvaje o asesino a animales como los tigres, el protagonista de esta historia pero ¿realmente son tan crueles y peligrosos? ¿o sencillamente nos hemos cruzado en el camino de la naturaleza para trastocar su mundo, contaminar su medio y robarles a sus crías? aún nos queda tanto por aprender que a veces pienso que el ser humano es el más torpe de todos los animales del planeta.
Éstas y muchas más reflexiones se pueden trabajar con niños y adolescentes tanto en casa como en las escuelas a través de las palabras e ilustraciones de libros tan breves e intensos como éste. Sin duda, lo guardaré como otra de mis doradas joyas en mi estantería y como diría Rajá: gggrrrrrraaaaaahhh!!!
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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