Reflexión; días extraños

Jueves reflexivo; esos días...

Hola a todos y bienvenidos un día más. Ya estamos a jueves y toca reflexión así que sin más rollo empezamos.

mimosa

Lo mejor de febrero es la mimosa, qué bien huele

Antes de mi parón tenía pensado dedicar un jueves reflexivo a mi gatito, porque a finales de enero es su cumple. Entonces me puse enferma y el cumple ya ha pasado, pero nunca es tarde y no quiero dejar de acordarme de él.

El año pasado también hablé de su cumple aquí, pero no voy a releerlo, escribiré sobre la marcha y luego veré si coincido en aluna cosa o no.

Nuestro gato llegó un enero frío y lluvioso. Estaba junto a un contenedor, pasamos de casualidad por allí, íbamos a ir por otra calle que estaba en obras, y tras contemplar esos ojos lo tuvomos claro; llegó para quedarse. De esto hace 16 años y no nos podemos imaginar la vida sin él, pero hace un mes, nos dio un susto terrible.

gato

Aquí cuando llegó, hace 16 años. La foto con cámara analógica no tiene gran calidad

El día en cuestión fue un día extraño, podemos decir que fue uno de esos días. Era domingo y había preparado unas cositas ricas para comer en familia. Antes de comer mi madre y mi marido no le echron en falta y nos dimos cuenta de que no estaba en sus sitios habituales, es decir, en el regazo de alguien, en un radiador o en su sitio junto a la ventana.

Después de buscar lo encontramos debajo de una cama. Cuando mi gato se esconde, siempre siempre es que está malo, así que nos entró mucho miedo.

Ya os dije muchas veces que lo llamamos M.A. porque para sacarlo a la calle tenemos que drogarlo, como a M.A. el del Equipo A que lo drogaban para montar en el avión. En esas circunstancias no lo íbamos a drogar así que intentamos averiguar lo que le podía estar pasando sin tener qu eir a l veterinario y así evitarle ese mal trago.

Mientras, empezamos a preparar el transportín por si había que llevarlo al veterinario, y no fuimos capaces de encontrar la puerta(la del transportín, la de casa aún estaba localizable). Creemos que se ha ido a la basura entre las cosas que se tiraron durante la reforma que hicimos estos meses, porque otra idea no se me ocurre. El caso es que teníamos un transportín sin puerta.

Desesperada, llamé al veterinario, y la chica que estaba de guardia me dijo que me podía prestar uno si hacía falta. Podíamos ir a la clínica a por él, volver a casa, llevar al gato y ya lo dejábamos allí. Quedamos en ir uno de nosotros a buscarlo si hacía falta.

Mientras, toda la familia estaba deliberando porque no lo queríamos llevar, ya que al ser tan mayor ese estrés es malísimo, pero claro, no llevarlo... No bebía ni comía y ya no sabíamos qué hacer cuando quiso ir a mi habiación. Y al subirse a mi cama, mi marido vio que tenía una pupila muchísmo más dilatada que otra y estaba empezando a paralizarse.

Entonces nos entró el pánico. Ir a por el transportín nos parecía complicado porque entre ir y venir y que la chica lo preparase nos llevaría más de media hora, más el tiempo empleado en llevar el gato.

El coche descartado porque es complicado aparcar y hay que dar muchas vueltas.

Entonces, desesperados, decidimos meterlo en nuestro transportín y como tapa o puerta usamos un cesto que me había traído mi hermana para hacer una manualidad. Era un cesto enorme(y muy envejecido, de hecho era para tirar hasta que se nos ocurrió una manualidad), el transportín cabía dentro, pero era muy complicado de llevar porque iba en horizontal. Y para colmo envuelto con una manta para aislar al gato de ruidos y olores.

Al final lo apañamos de un modo muy cutre y nos fuimos corriendo. Toda la familia fuimos en cuchipandi. El gato iba llorando y maullando, mi marido reventaba con aquel peso muerto y el resto corríamos en silencio.

En una calle un perro empezó a ladrar al transportín/cestacutre que parecía sacada de la basura y hecho con retales, y mi hijo empezó a jugar con él para que no asustara más al gato...un cuadro todo.

Cuando entramos en la clínica el pobre estaba histérico. A consulta pasamos solo mi marido y yo, el resto estaban en la sala de espera y les íbamos mandando whatsapp con el parte médico.



*El vídeo es de la clínica mientras esperábamos por la analítica. Yo estoy llena de pelos de él, que tuvieron que pelarle las patitas.

Le hicieron una analítica de urgencia y le salió todo genial excepto la glucosa, que se les altera por el estrés. Pero ese ojo indicaba algo, y algo grave.

Con todo nuestro dolor tuvimos que dejarlo ingresado, y al día siguiente le hicieron dos radiografías y un TAC(este mes si veis algo de un atraco a un banco en Gijón, seguramente ha sido cosa mía) porque había una masa extraña que podía ser un tumor.

Día y medio después pudimos llevarlo a casa, y lo hicimos en un transportín que compramos en Walapop para salir del paso, uno nuevo ya si eso en otra ocasión que en la clínica nos hemos dejado una pasta. Tuve que pincharlo y ponerle un corticoide por la vía, pero es un campeón y pudimos hacerlo muy bien.

Y el jueves nos dieron los resultados. Por suerte no hay tumor. Pero hay una degeneración propia de la edad que le ha tocado un nervio(por eso la falta de equilibrio y el ojo dilatado) y es una degeneración grave, una artrosis con esclerosis.

Pero le han dado un tratamiento para paliar los síntomas, es caro y de por vida, pero milagrosamente lo toma bien y poco a poco vuelve a ser él. Los primeros días estaba agotado por el corticoide y todo el estrés, pero ha mejorado mucho. A veces pierde un poco el equilibrio, pero come, juega y es feliz.

gato

En Navidad, con papel de regalo en el cuello

Y nosotros estamos encantados de tenerle mucho más tiempo en la familia, él llegó para alegrarnos la vida.

Para ir acabando os diré que febrero, el mes que más odio, se está pasando rápido. Todo está precioso. Ayer por la tarde íbamos en el coche y veíamos caminos rodeados de mimosa, mi flor preferida. Y como contraste las montañas nevadas al fondo. Al bajar la ventanilla todo olía a mimosa, y el sol brillaba tanto que por momentos olvidaba en qué mes estaba.

gato

La cara de felicidad cuando está en los regazos...

Hoy tengo un día algo complicado pero tengo mucha ilusión con el finde y con la semana que viene, así que estoy llevando el mes lo mejor posible, con ilusión y con muchos buenos momentos.

Bueno, menudo rollo os he soltado con el gato, pero es que lo vimos muy mal, en la propia clínica lo veían bastante mal todo. A ver si cojo el ritmo y el post de la semana que viene es más alegre.

Muchas gracias por leerme y nos vemos el sábado con el resumen semanal.

¡¡¡¡¡Feliz jueves!!!!!!!

Fuente: este post proviene de Pequeños trucos para sobrevivir a la crisis , donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Recomendamos