Marcando una tendencia con la afianzacion de Mick Taylor en el grupo, que previamente había tenido algunas tímidas apariciones en “Let it Bleed”, su disco anterior, “Sticky Fingers” despliega una versión de rock and roll mucho mas virtuoso, con profundos sentimientos de blues.
Este disco también aloja una de las mejores baladas de la historia, “Wild Horses”, que a lo largo de los años sigue encontrándose en los top de este tipo de canciones. Otro tema destacado del disco es el blues arrastrado en su máxima expresión, “You gotta move”. Además podemos disfrutar las maravillosas “Dead Flowers” o el poderío casi heavy de “Sway”
Este disco es absolutamente aprovechable. No hay ni un segundo de relleno, y cada canción lleva hacia la otra, lo que lo convierte en un increíble camino del rock and roll, que esta cumpliendo 50 años, marcando el rumbo.