MIS SILENCIOS
Se escucha el resoplar:
no son las olas
que vencen a cada pez
ni las esferas que navegan en cuadrado,
es el perdido horizonte
que se quiebra entre las notas
del mortecino atardecer
y cubre el muro de las sombras
verdes y perfiladas de cada ortiga.
Se tornan fuego los perfumes
que agitaban nuestras voces
y detienen, del reloj,
sus afiladas agujas
presentes de otro tiempo.
¡No voy a crecer cayendo!...
Mañana dormirán las nubes
sobre la efímera silueta de mi cárcel
y quedarán así anegados uno a uno
y para siempre todos mis silencios.
.
JJRME (Terly)