Martes de relato

Relato

Hola a todos y bienvenidos. ¿Cómo ha ido el finde? El mío variado, sol y campo, paseos, conciertos de mis hijos, familia e incluso lluvia en la playa, de todo un poco.

Ya sabéis que me cuesta compartir mis relatos, lo paso muy mal, pero a la vez me autoanimo a hacerlo, jejeje, así que me he animado con uno.

Esta vez he rescatado uno publicado hace mucho tiempo porque he visto que por entonces no tenía a muchos de los seguidores qu etengo ahora así que para la mayoría es nuevo.

Y sin más rollo empezamos.

Este relato lo escribí hace mucho y fue sobre la marcha, está inspirado en una frase queescuché durante mi adolescencia en la serie Sensación de vivir.

embotellar-recuerdos

Como siempre un dibujito de mi hija


Recuerdos embotellados.

María siempre quiso detener el tiempo. Fue una niña feliz, muy feliz, que saboreaba cada instante de la forma más intensa.

Es una apasionada de la vida que quiere revivir los momentos buenos una y otra vez.

Su familia siempre la comprendió, pero no saben como ayudarla así que al cumplir 16 años viajan por el mundo, visitan a los más sabios magos, a las hadas más listas, se cuelan en los santuarios de los elfos y leen los viejos diarios de los duendes, y juntando todos esos pedacitos de sabiduría María aprende a embotellar los recuerdos.

Desde ese momento, en una vieja habitación, y rodeada de hierbas aromáticas y de incunables se pasa las horas embotellando recuerdos y los guardaba cuidadosamente etiquetados en una vieja alacena.

Y cuando se siente melancólica o quiere volver atrás en el tiempo, elige cuidadosamente una botella, apaga las luces, abre la botella que ha elegido y se deleita en esos instantes que tanto ya ha disfrutado, puede saborearlos de nuevo.

Pero el tiempo pasa, sigue su camino inexorablemente y una de esas mañanas después de la lluvia en las que el sol brilla más que de costumbre y el cielo es más azul que nunca, con ese aire a cielo recién lavado que tanto le gusta a María, encuentra el amor.

Y desde ese momento sus recuerdos embotellados no tiene solo su imagen, sus recuerdos ahora son de los dos, están llenos de risas, de caricias y de felicidad.

Muchas tardes de invierno se sientan juntos, muy juntos, con las cortinas fuertemente cerradas y abren una tras otra las botellas que contienen esos recuerdos que tanto les gusta contemplar.

En cuanto María quitab el viejo corcho la estancia se llena de esos olores del ayer que les hacen viajar en el tiempo, y así pasan sus días, rodeados de viejos recuerdos.

Los años van pasando, sus padres se fueron y la vida no quiso regalarles hijos pero María aprende a vivir con ello, tiene tantos recuerdos a su alrededor que no necesita nada más.

Con el correr del tiempo empieza a ver solamente los recuerdos de su juventud, no le gusta verse ya mayor, prefiere contemplar los momentos de antaño donde todo era felicidad. Y así gasta su vida, entre recuerdos y abrazos de amor verdadero de su marido.

Y una fría mañana de febrero, cuando el cielo de nuevo brillaba después de la lluvia su marido la deja para siempre, no puede quedarse a pesar del amor que loses une y ella tiene que dejarlo partir.

Esa misma noche María va al cementerio, y bajo la luna llena y rodeada de un perturbador silencio se sinta junto a la tumba de su amado y abre una de aquellas botellas cargadas de recuerdos. En medio de la noche, las imágenes de su boda llenan el cementerio; y ella, con las lágrimas surcando su cara, puede verse a sí misma, joven y radiante saliendo de la iglesia del pueblo, rodeada de todos aquellos que ahora reposan en ese mismo cementerio. A pesar de dedicar toda su vida a retener recuerdos, no había podido retenerlos a ellos. Y con las imágenes desdibujadas por las lágrimas, sigue contemplando su boda.

FIN

Y hasta aquí el relato, un cuento cortito para empezar la semana. reCreo que es genial recordar lo bueno, atesorar recuerdos es maravilloso pero nunca debemos olvidar el presente. Aferrarse al pasado sin disfrutar el presente es un error, y al final, si seguimos ignorando el presente dejaremos de crear recuerdos y al final no tendremos ni pasado ni presente.

Muchas gracias por leerme y nos vemos mañana con un truco.

¡¡¡¡Feliz martes!!!!

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