Buenos días y bienvenidos un día más. ¿Qué tal ha ido el finde? Por aquí llevamos un septiembre espectacular, excepto un par de días, y han anunciado que vuelve el buen tiempo así que hay que aprovechar que el invierno es muy largo y ya no es lo mismo.
El otro día escribí un post sobre mudanzas y me acordé de un libro que perdí en una mudanza hace mucho y que volvió a mi vida de una manera un tanto curiosa.
Ya había hecho un post sobre este libro hace tres años pero me apetecía volver a hablar de él porque la mayoría de mis lectores actuales no me leíais entonces. Y sin más rollo empezamos.
El libro al que me refiero es Papaíto piernas largas, un libro que descubrí con unos doce años y me encantó.
Desde que llegó a mi vida lo he leído un montón de veces, es de lectura fácil, y además adoro la literatura episcolar, me gusta mucho el enfoque porque es una historia que parece actual aunque tiene 106 años y además me gusta forma parte de mi vida, sin más, está en mi pasado, en mi presente y espero que en mi futuro.
Por supuesto no os voy a hacer ningún spoiler, solo os doy mi opinión porque es un libro que he leído tantas veces que me apetecía compartirlo.
La primera edición que tuve era chulísima, pero como ya os dije en una mudanza se perdió, busqué durante meses pero claramente se fue a la basura por error o se quedó en el camión.
El caso es que no lo encontraba en ninguna librería y lo echaba mucho de menos aunque ya me había resignado a su ausencia, pero a veces la vida nos sorprende y un día, bastantes años más tarde, fui a Lidl, siiii, el supermercado, y lo vi. Y cuando me recuperé de la sorpresa(allí compro planchas del pelo, cremas, chocolates y pijamas, pero nada de libros, y claro, lo compré, no podía seguir viviendo sin él.
Este es el libro que tengo ahora, llegado de Lidl.
Por fuera es distinto al que yo tenía pero por por dentro es igual, la misma traducción y está lleno de ilustraciones hechos por la propia autora.
Además del post antiguo que os dije a también hablé de él en una entrada sobre mis libros que está aquí.
Si algo he de destacar es que este libro está escrito en 1912, y la chica protagonista va a la universidad. Aquí en España hasta no hace tanto ver una mujer en la universidad era una proeza o más bien una rareza, y en cambio en EEUU hace 106 era normal que las mujeres se formaran, de hecho es una universidad de chicas, vamos que allí no era algo raro aunque los estudios a los que podían optar eran en cierto modo limitados, cosa comprensible dados los tiempos, pero al menos era un avance, en cierto modo, y una base para ir alcanzando la deseada igualdad.
La otra caracterísitica que me encanta de esta obra que adoro es que excepto el primer capítulo la novela entera la forman cartas. Adoro la literatura epistolar y creo que leer este libro me ha ayudado a escribir muchas cartas.
Aquí vemos el formato de carta.
La historia es muy sencilla, una huérfana, Judy Abbot, de 17 años vive en un orfanato.
Cada miércoles, lo que ella llama un miércoles gris, un día odiado por ella, reciben la visita de los benefactores y le toca trabajar duramente.
Uno de estos miércoles, cuando su futuro es muy dudoso ya que se está haciendo demasiado mayor para seguir en el orfanato, pero tampoco tiene a donde ir, la directora del orfanato le anuncia que un señor se encargará de enviarla a la universidad, y el único que el hombre quiere es un poco de información, el pago por la educación será recibir cartas de su puño y letra informándole de sus progresos.
El benefactor pretende permanecer en el anonimato, pero cuando a Judy le dan la noticia sale rápidamente del despacho y lo ve de lejos, es alto y delgado con una gran sombra, como esas arañas de patas largas.
Y cuando nuestra querida amiga empieza a escribirle no sabe como dirijirse a él, le han dicho que le llame John Smith y a lla le parece muy soso e impersonal, y no sabe qué nombre usar cuando a su cabezale acude el recuerdo de la sombra que le recuerda a una araña que en inglés se llama Papaíto Piernas Largas y da ese nombre.
El libro es muy entretenido, nos cuenta como es la vida universitaria, habla de sus amigas, de los familiares de sus amigas, de sus veranos en una granja ya que no tiene hogar donde ir, y de muchas cosas entrañables.
Las ilustraciones las hizo la propia autora.
La autora, Jean webster era sobrinanieta de Mark Twain, pero además estudió en la universidad estudios ingleses, economía, se especializó en derecho penal y fue una persona moderna, avanzada, de amplias miras y realmente especial.
Yo la admiro mucho porque fue una persona llena de inquietudes y con ganas de cambiar el mundo, no permitió que la dificultad de los tiempos en que vivía la detuvieran.
Este libro nos hace ver que en todas las épocas tuvimos personas especiales y luchadoras que intentaron hacer el mundo un poco más justo.
Ahhhh, y volviendo a la novela, por supuesto, no falta el amor, y eso a mí me mola.
Además hay varias pelis, yo las vi hace muchos años, en peli normal y en dibuos y aunque no capta la esencia del libro me gustaron bastante.
Bueno, pues hasta aquí el post, que me hacía mucha ilusión compartir un libro que siempre me ha acompañado, que me he llevado de viaje, de vacaciones, a la playa y a todas partes, y que volvió a mi vida de forma inesperada.
Y vosotros;Conocíais el libro?¿Os gusta la literatura epistolar?¿Os gusta esta obra?
Fuente: este post proviene de Pequeños trucos para sobrevivir a la crisis , donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: