Compromiso sobre la moralidad
Tras décadas de relaciones turbulentas, se mostraron propuestas amistosas al reducirse los llamamientos a la democracia en Myanmar. La moralidad fue dejada de lado en la conducta de la India con Myanmar. Oficialmente, en 1996 Pranab Mukherjee, el Ministro de Asuntos Exteriores de la India confirmó la posición india de no interferir en el asunto interno de Myanmar entre los movimientos democráticos de la oposición y la junta militar. Declaró que la prioridad era proteger los intereses estratégicos y económicos de Myanmar en lugar de preservar la democracia. Este cambio en la política exterior marcó el fin del “idealismo nehruviano” y el comienzo de la realpolitik en la política exterior con Myanmar.
Todos los gobiernos sucesivos desde el decenio de 1990 han dejado de lado la ética en aras de consideraciones de interés propio. Aunque había partidos políticos que favorecían el restablecimiento de la democracia en Myanmar, no había una oposición sustancial a la participación de la junta, a diferencia del acuerdo nuclear civil indoamericano que fue obstaculizado por el Partido Comunista de la India (Marxista). El actual gobierno administrado por el Partido Bharatiya Janata ha continuado la tradición mostrándose indiferente a la crisis de los Rohingya y a las violaciones de los derechos humanos que se producen en Myanmar. A pesar de comprometer la moralidad, los intereses de la India en Myanmar no han resultado como se esperaba.
Intereses estratégicos
China ganó la ventaja de ser el primero en entrar en Birmania bajo la “política de buena vecindad” de Deng Xiaoping, un cambio con respecto a la política intervencionista de Mao Zedong de apoyo a los insurgentes comunistas locales. Cuando la insurgencia comunista en 1989 se derrumbó, China y Birmania pudieron establecer formalmente el comercio transfronterizo. China reconoció la posición estratégica de Myanmar como proveedora de rutas comerciales a las provincias sin litoral de Yunnan y la capacidad de acceder al Océano Índico. La influencia en Myanmar permite a China penetrar en la región nororiental de la India y controlar la Bahía de Bengala, dejando así a la India expuesta a ataques desde el este.
El Golfo de Bengala tiene unas vías marítimas de comunicación vitales que pueden ser de utilidad estratégica para los países. Gran parte del comercio también fluye a través de la ruta, al sur del Golfo de Bengala pasando por el Estrecho de Malaca. Los intereses estratégicos de China salieron a la luz en el decenio de 1990 cuando la India recibió informes sobre supuestas acumulaciones militares en Myanmar. China estaba construyendo estaciones de vigilancia de inteligencia en el suroeste de la costa de Myanmar, que está cerca de los territorios indios de Andaman y Nicobar. En los últimos años, China intensificó su recopilación de información en la Bahía de Bengala con barcos militares que frecuentan la zona. Se consideró una grave violación de la esfera de influencia de la India, ya que China representa ahora una amenaza para el norte y el este de la India. La amenaza de China en la relación entre la India y Myanmar fue posteriormente fomentada, temiendo la “Tibetización de Myanmar”, principalmente porque proporciona una ruta de invasión a la India.
Los esfuerzos de la India se empantanan en Myanmar al intentar neutralizar las insurgencias en la frontera noreste. La insurgencia naxalita, que duró décadas, redujo su influencia, pasando de afectar a 200 distritos en 20 estados a 106 distritos en 10 estados. Sin embargo, sigue siendo una importante amenaza para la seguridad que impide que la India alcance la condición de superpotencia, como opinó Ramachandra Guha, historiador indio. En otras palabras, si la India afirma con razón ser un rival de China, entonces su “casa” debe mantenerse en orden.
La India y Myanmar han cooperado para hacer frente a la amenaza que representan los insurgentes en sus países. India atacó a los rebeldes arakaneses en las últimas incursiones conjuntas, ‘Operación Amanecer’. Estos grupos insurgentes se mueven con fluidez a través de las fronteras y coordinan sus ataques de emboscada a las tropas indias desde las bases de apoyo en Myanmar. Los insurgentes de ambas fronteras reciben apoyo de sus enclaves étnicos, que son un semillero de reclutamiento. Mientras que la India se ocupa de su inseguridad interna en el noreste, China avanza en su influencia geoestratégica al colgarle bienes económicos a Myanmar.
Intereses económicos
China está estableciendo vínculos económicos con Myanmar a través de la Iniciativa del Cinturón y la Carretera (BRI), en la que se están llevando a cabo proyectos como el proyecto del ferrocarril Muse-Mandalay y el puerto de alta mar de Kyaukphyu. El puerto de Kyaukphyu, será un punto de partida para un oleoducto de gas y petróleo y un enlace ferroviario al estado de Yunnan en China. Si bien los proyectos de China están avanzando considerablemente, el proyecto multimodal Kaladan de la India, como muchos otros, se enfrenta a muchas demoras debido a la falta de coordinación entre los diferentes organismos de ejecución, la escasa supervisión y las limitaciones financieras. Además, las protestas y los riesgos de seguridad actúan como obstáculos para la construcción de los proyectos.
El comercio bilateral entre la India y Myanmar ha aumentado a lo largo de los años pero sigue estando por debajo de la relación comercial de China. Las exportaciones de la India a Myanmar superan los 1.000 millones de dólares y las importaciones de Myanmar son de más de 500 millones de dólares. Sin embargo, las exportaciones de China con Myanmar son más de 10 mil millones de dólares. En parte, la razón de las escasas muestras de exportación e importación es que las exportaciones globales de Myanmar consisten en alimentos, combustible y productos agrícolas no alimentarios. Myanmar tiene una gran demanda de productos manufacturados que son satisfechos por China que tiene una ventaja competitiva sobre la India. El comercio bilateral de la India con Myanmar ha crecido gradualmente, pero está muy por detrás de China, con sus inversiones masivas y su ventaja de ser el primero en llegar al país.
La India ha arriesgado el oprobio internacional al comprometer sus credenciales democráticas en Myanmar con pocas ganancias. Con mayor destreza militar y poder económico China ha podido maximizar el valor geoestratégico y económico de Myanmar mucho mejor que la India. Es lamentable que la iniciativa de la India de adoptar políticas instrumentales no haya dado mejores resultados.
Los puntos de vista y opiniones expresados en este artículo son los del autor.
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