LA COPA DE MÁS
Al beber la primera yo sentía
el placer que los dioses me brindaban,
mi boca y mi garganta me gritaban
más y más, que esto es poco todavía.
Al beber la segunda, ¡qué alegría!
el sol y su calor por mí pasaban,
el edén y el placer se entrecruzaban,
más y más, y mi yo se sonreía.
Después de una tercera y una cuarta,
mi cuerpo ya imploraba por la quinta,
la sexta, sin pensar, me vino dada.
A ver si ese mastuerzo ya se aparta;
¡dominguero, novato, chupa tinta!...
!Boom¡... ya escucho de lo alto su llamada.
JJRME (Terly)
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