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Turismo: parque fluvial de Gijón

Parque fluvial de Gijón; turismo en bici, caminatas y familia.

Hola a todos!!!!! ¿Qué tal el fin de semana? Espero que genial. El mío ha estado bien, empiezo mucho más descansada, he podido desconectar.

Hace mucho que no hago una entada de turismo, así que me he animado. De este tema tengo varias, os llevé a ver un auténtico Dolmen prehistórico, también fuimos a ver la zona industrial desde lo alto en la Campa Torres, hicimos la ruta del Tragamón para empaparnos de las leyendas del lavadero, nos perdimos en el Parque de Isabel la Católica, entre aves y estatuas salpicando los jardines, hicimos picnis en el Parque de los Pericones y volamos cometas en el Parque de la Providencia. Y también nos fuimos a eventos, y a excursiones a montes y lugares geniales que podéis ver en la etiqueta de turismo.

Y hoy me apetecía compartir una ruta ideal para toda la familia, que nosotros hacemos mucho en bici, pero también andando o incluso corriendo.

Y sin más rollo empezamos.


Ir en bici es toda una experiencia.

Antes de empezar quiero aclarar que mi post no es un post de turismo al uso, siempre lo repito pero me gusta dejar claro que es más bien un post de sensaciones, de impresiones y recuerdos, y espero transmitiros algunos de esos sentimientos.


Es un lugar de lo más evocador.



El río es muy relajante, es una gozada.

Ya os he comentado varias veces que mi ciudad tiene unas cuantas rutas interesantes para hacer caminando o en bici, lo ideal para esas fechas en las que no queremos coger el coche pero necesitamos desconectar. Y uno de estos sitios el la Senda del Fluvial.


Los senderos y bifurcaciones invitan a caminar.



Los viejos árboles esconden muchas historias.

Esta ruta empieza en el barrio de Viesques, al que podemos acceder andando, en coche, en bus o en bici, ya que hay carril bici directo.

En esta parte tenemos un parque inmenso lleno de juegos; columpios, toboganes, muchos futbolines gratis a los que podemos acceder si llevamos unas pelotitas. Y también hay mesas de pin pon, pistas de baloncesto con canastas y zona de arena. Es una zona ideal para los peques y no tan peques, que nosotros podemos estar horas en el futbolín, jejejeje.


La zona de juegos es enorme, esto solo es una parte.

Pero si queremos preferimos hacer una excursión solo hay que segur la senda.


Si no queremos columpios tenemos una enorme senda a nuestra disposición.

Esta ruta transcurre paralela al río Piles, empieza en Viesques, como ya os he dicho, termina en La Camocha, aunque si queremos podemos enlazar con otra que va desde la Mina de la Camocha hasta el poblado de Santa Bárbara, nosotros lo hacemos muchas veces también.


Los árboles bordean el camino y nos acompañan.

Durante el camino no es raro cruzarse con románticos puentes que nos invitan a soñar, de hecho mi hija y yo solemos imaginarnos que somos Elizabeth Bennet paseando por los serpenteantes caminos de Pemberley, o Anne Shirley caminando soñadora por Avonlea.


Hay muchos puentes y todos muy bonitos.


Nunca me canso de pasar por ellos.

De vez en cuando podemos bajar al río a contemplar las cristalinas aguas, a salpicarnos, mirar si hay peces o si tenéis perro, a que se bañe que en verano les encanta.


Bajar al río es genial.


En los ríos hay tanta vida...

Este lugar es ideal para hacer picnics. Hay tanto prado que podemos hacerlo en muchos sitios, de hecho nosotros vamos variando, a veces lo hacemos bajo un árbol, otras junto a alguna de las bajadas al río y otras lo hacemos en las mesas que cada cierto tiempo hay en el prado.


Ir de picnic es algo maravilloso.


Y sino queremos comer en el suelo hay muchas mesas.

La primera parte de la ruta transcurre prácticamente en la ciudad, de hecho se ven edificios y tenemos que pasar al lado del autopista, pero luego todo ese bullicio va quedando atrás y los árboles, los caminos de gravilla y el río son nuestros compañeros de viaje.


Las montañas del fondo ayudan a desconectar.


Me encantan los contrastes, verde, río, montañas y zonas más secas.

Yo he hecho esta senda muchas veces, con mis hijos pequeños, con mis hijos mayores, con mi marido e incluso con toda mi familia, y me han quedado recuerdos geniales de risas, historias y felicidad, esa felicidad que dan las cosas sencillas y que siempre está ahí.


Ver como se oculta el sol es una experiencia muy bonita.


Nosotros nos vamos con el sol y decimos adiós a la mesa vacía y a la tarde de recuerdos que hemos vivido.

A veces, cuando miro fotos de algunas de esas veces me doy cuenta de lo feliz que era en esas ocasiones.

Una vez hice la ruta con mis hijos, con mis padres, mi marido y con mi hermana, y decidimos hacerla de tarde para ir viendo la puesta de sol, merendamos junto al río y cenamos en un bar de la zona donde acaba la ruta, un picoteo sencillo que supo a gloria.
Y lo mejor fue que volvimos todos en bus, y mientras lo esperábamos en la marquesina nos dedicamos a contar historias de miedo, jejeje, y lo pasamos genial, mis padres sabían muchísimas historias.


Los remansos del río son para mí remansos de paz.

A veces no hacemos la ruta entera, vamos hasta la mitad con un libro, una manta y algo de picoteo y nos pasamos la tarde leyendo junto al río, acompañados solo del canto de los pajaritos.


Los pajaritos viven felices


Ir en bici por ese sendero blanco, con los prados a los lados y las montañas a lo lejos me encanta.

Si algún día venís por aquí os lo recomiendo porque hay para todos los gustos y edades, hay sol y sombra, prado y río, paseo, puentes, incluso un viejo molino sobre el que nos inventamos muchas historias, y que seguramente ninguna se parece a la realidad.


El molino siempre nos inspira.


Tenemos casas abandonadas, molinos y de todo...

Si os gusta montar en bici o simplemente caminar, aquí no os vais a aburrir, y además si estamos a finales de agosto hay moras esperando por vosotros.


Los rayos de sol juguetean entre las hojas de los árboles.

Bueno, no quiero hacer el post eterno, que ya lo es porque me ha costado horrores elegir las fotos, tenía un montón y me gustan todas, así que me despido diciendo que merece mucho la pena que os acerquéis, a cualquier hora es bonito aunque ya sabéis que tengo debilidad por las puestas de sol.


Las puestas de sol son un regalo de la naturaleza.


Y todas son bonitas.

Mil gracias por leerme y os recuerdo que mi amiga Gadi ha hecho un concurso de looks y yo participo, podéis votarme a mí o a cualquiera de las otras chicas porque hay algunos que son geniales. Solo tenéis que ir a este link y allí ella os deja un email para votar por quien queráis.

Y ya como último favor, he publicado un artículo en una revista digital y se valoran alas visitas, así que os espero con los brazos abiertos y además os daría mi eterna gratitud. Os dejo el enlace.

Un besito, mil gracias por todo y hasta el miércoles.

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