Hola a todos y bienvenidos un miércoles más. ¿Qué tal va a semana? Espero que genial. La mía algo menos ajetreada que la pasada y ya con eso me conformo, jejeje, y aunque tengo muchos compromisos familiares y actuaciones de mis hijos en lo que queda de mes y parte del siguiente, lo que me deja ocupados todos los fines de semana y algunos viernes, como son cosas buenas me animo, mientras sea bueno, genial.
Ya sabéis que hoy toca truco y se me ha ocurrido compartir algunos de los que hacemos en mi familia para no engordar más de la cuenta en verano.
Y sin más rollo empezamos.
Empiezo diciendo que esto es todo muy relativo y lo ideal es comer sano y equilibrado todo el año. Y además hay factores como la genética o problemas de tiroides que pueden hacer que esto cambie, así que son consejitos para cuidarnos un poco, no para solucionar problemas, y siempre según mi experiencia que cada uno somos un mundo.
Y antes de empezar os aclaro que yo soy delgada, y cuando estoy nerviosa adelgazo, pero sí que es verdad que si me paso comiendo y no me muevo algo sí que engordo. Y estos consejos son, como ya dije generales, mi hermana y mi madre, que engordan mucho más que yo los aplican y van genial y yo los aplico a veces.
- Intento compensar los días de exceso.
Esto es muy obvio pero importante. En mi familia por el verano vamos a comer fuera algunas veces, hay reuniones familiares, días de playa, celebraciones y siempre nos pasamos.
Yo esos días como lo que me apetece, es importante disfrutar y no pasa nada pero al día siguiente o incluso algunos días después estoy a base de ensaladas, batidos de los que me hago desde hace tantos años y gazpachos o cositas así.
-Busco un hueco para caminar después de las comidas copiosas.
Ya habéis visto por mis fotos que por aquí siempre hay lugares para caminar, así que cuando como mucho, después de reposar un ratito y estar en familia siempre aprovecho para dar un paseo largo, ya sea por monte, por una ruta o por algún pueblecito, no importa.
-Los helados los tomo cuando sé que luego puedo caminar bastante.
Una buena forma de tomar un helado sin engordar demasiado es tomarlo mientras paseamos. Yo suelo comprarlo en las heladerías del paseo de la playa y camino un par de horas así que me imagino que lo quemo. Y los cojo artesanales, que supongo que serán un poco mejores que los industriales.
-Llevo comida sana siempre que puedo.
Cuando voy a la playa intento llevar comida sana. Si voy todo el día me gusta llevar ensaladilla rusa, tortilla, filete empanado y rollo de bonito, vamos, que muy ligero no es, pero si voy solo por la tarde sí que llevo cosas light.
Me gusta preparar sandwich en pan de cereales, los hago vegetales o de tortilla francesa y espárragos, o de pechuga de pavo y lechuga, o un táper de melón con jamón, cosas así. Y mucha fruta, y nada de refrescos, agua.
Las cerecitas siempre apetecen, y los bocatas son de pechuga a la plancha con tomate y lechuga.
- Hago ejercicio en la playa.
Y no me refiero a correr, eso lo hago a veces pero sin ir a pasar el día a la playa.
Mi manera de hacer ejercicio es muy fácil. AL llegar tomo un poco el sol y luego juego a las palas(esas raquetas de plástico) o a la pelota hasta el momento de bañarse.
Luego me baño nadando, saltando olas y moviéndome.
Y después de comer caminamos bastante por la orilla del mar y nos bañamos de nuevo.
Y después de merendar nos comemos un helado paseando por el malecón o por algún lugar que nos guste as´que lo que vamos comiendo yo creo que se quema.
Un paseo por el malecón comiendo un helado es genial.
- Hago rutas andando o en bici.
Casi todas las semanas hago alguna ruta, a veces larga y a veces corta, pero me gusta caminar. Algunas como esta que os conté aquí son duras, y otras como esta de aquí son fáciles, pero las fáciles nosotros las estiramos y caminamos por más sitios.
-Tomo algo para la retención de líquidos.
El año pasado tomé unas infusiones que me vinieron genial, y este año las voy a comprar porque además de ayudarme a beber agua me vinieron genial.
- Acompaño las comidas con ensaladas o gazpachos.
Ya que a veces me paso acompaño las comidas con ensalada o pongo delante algún gazpacho, en vez de hincharme a patatas fritas o a pan.
Un gazpacho de sandía, mmmm.
- Siempre llevo la merienda o cosas para picar.
Soy muy tragona y si no me llevo merienda acabo comprando algo para comer y depende de donde esté pues a veces como porquerías, bollerías o cosas malísimas. Pero si llevo mis cosas pues son sanas, aunque de vez en cuando confieso que cae alguna chuche.
Normalmente llevo algún minisandwich tipo los de la playa y fruta, o algo de embutido y fruta, cosas así.
-Siempre llevo agua.
Cuando era pequeña mi madre me la llevaba y luego me acostumbré a llevarla yo y en mi casa nadie sale sin llevar agua, lo que además de hidratarnos es genial para limpiar y depurar.
Bueno, realmente esto es lo que yo hago, aunque sin agobios y si me voy unos días como de todo, intento no abusar pero si algo me gusta lo como.
Lo importante es movernos un poco y equilibrar, por lo demás pues tampoco le doy muchas vueltas, el verano es breve y hay que aprovecharlo a tope.
Espero que os ayude el post aunque ya digo que son cosas muy normales y cada persona es un mundo, unos necesitan dietas más estrictas y otros pueden ponerse morados sin engordar, pero vamos, en términos generales con cuidarnos un poco y movernos el verano no tiene porqué ser una mala época para cuidarnos.
Muchísimas gracias por leerme y nos vemos mañana para reflexionar, aún no sé de que voy a hablar, a ver si hoy me encuentro a alguien que me inspire como la semana pasada.
Un besito y hasta mañana!!!!!!!!