Iñaki Larrabeiti: "El yoga fue calando en mí como la lluvia suave impregna y satura las profundidades de la montaña"

Iñaki Larrabeiti (Basauri, 1959) es un hombre afable, alegre y atento, alguien que siempre está dispuesto a ayudar a los demás. Él se dedica a la enseñanza del yoga, pero hasta 2012 fue directivo de Eroski. Me confiesa que necesitaba más tiempo libre para él y su familia, por eso decidió cambiar su estilo de vida y abrir Lasai Bizi, su acogedora escuela de yoga y meditación en Basauri. Ahora trata de vivir en paz consigo mismo y desarrollar al máximo su potencial como persona.





Iñaki en posición de sirsassana

¿Por qué dejaste tu anterior puesto de trabajo?

Trabajaba en Eroski como directivo, pero quería más tiempo libre para mí y mi familia, realizar una actividad que me llenara sobremanera. Me atrajo la idea de poder dedicar los últimos años de mi vida profesional a difundir y enseñar esta maravillosa práctica.

¿Cuándo y por qué decidiste iniciarte en el mundo del yoga?

Hace 20 años empecé a practicar yoga para combatir el estrés en el que vivía. Desde un primer momento me enganchó la capacidad que esta disciplina tuvo para relajarme y lograr un descanso más satisfactorio. Poco a poco fue calando en mí como la lluvia suave impregna y satura las profundidades de la montaña. Así es como actúa esta disciplina, a todos los niveles de la persona. En 2007, y sin la intención de dedicarme a la enseñanza, inicie la formación como profesor. En 2010 comencé a impartir una clase semanal en la casa de cultura de mi municipio, en Zarátamo. Era muy enriquecedor ver las caras de satisfacción de mis alumnos al finalizar cada clase. Y en 2012 decidí dar un vuelco total a mi vida y dejé mi trabajo en la cooperativa. Así surgió Lasai Bizi escuela de yoga y meditación.

¿Qué mejoras has notado en tu cuerpo?

El yoga extiende su influencia a través del cuerpo físico y lo hace a nivel emocional, mental y espiritual. A través de la energía se consigue una frecuencia vibratoria más alta que actúa en capas más sutiles y profundas, logrando un desarrollo integral de la persona.

¿Crees que el yoga y la meditación han de ir de la mano?

A veces se diferencian yoga y meditación. Para mí son lo mismo. La meditación es yoga y el yoga es meditación en cada asana (postura).

¿Qué hay que hacer para ser instructor o profesor de yoga?

Hay diferentes formaciones. La de instructor y monitor se realiza en 200 horas. Y la más completa es la de profesor, que son 400 horas de formación teórica y práctica en 4 años. Esta última también incluye filosofía hindú, anatomía, pedagogía... Además se requiere la elaboración de una tesina supervisada y aprobada por un formador. Todo este aprendizaje es avalado por la UEY (Unión Europea de Yoga). Creo que lo más importante es la experiencia que adquirimos en las clases y la voluntad de seguir formándonos y profundizar en la propia práctica.

¿Cómo preparas tus clases, improvisas o tienes una idea antes de cada sesión?

Hago un esquema antes de cada sesión, aunque luego siempre introduzco alguna variación adaptándome a las circunstancias concretas de ese momento: el ambiente de la clase, la actitud del alumnado, mi propio estado emocional... Alguna vez he ido con una idea y he hecho una clase totalmente diferente.

¿Desde marzo has tenido que adaptarlas, qué opinas de las clases online?

Sí, desde el confinamiento impartimos clases online y ahora ofrecemos las clases presenciales en directo a través de internet. Creo que es un buen complemento para los alumnos con cierta experiencia que por diferentes motivos no pueden acudir a la escuela. Aun así no se pueden comparar, por internet apenas hay interacción con el alumno y resulta complicado indicar alguna corrección. Tampoco se siente la energía colectiva que se experimenta en una clase presencial. Desaconsejo la clase virtual para un alumno que empieza. La interacción directa es indispensable.

¿Dónde te ves dentro de 5 años?

Espero seguir dando alguna clase de yoga, no de forma tan intensiva como ahora, aunque ya tendré edad de jubilarme. Pienso que la jubilación activa es una buena alternativa cuando el trabajo que haces te recompensa y te llena.

¿Por qué y a quién recomiendas esta disciplina milenaria?

Se la recomiendo a cualquier persona y de cualquier edad. Cada uno tiene que sentir cuándo es su momento.


Lasai Bizi

Fuente: este post proviene de Relatos de tinta-e, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

El icónico retrato de Marilyn Monroe de Andy Warhol es todo un símbolo del arte pop y en 2022 fue subastado por 182 millones de euros, convirtiéndose así en la obra de arte más cara del siglo XX en se ...

Un niño de la India fue enviado a estudiar a un colegio de otro país. Pasaron algunas semanas, y un día el jovencito se enteró de que en el colegio había otro niño indio y se sintió feliz. Indagó sobr ...

Etiquetas:

Recomendamos