I´m Currently loving julio y agosto 2021

Los mejores momentos de julio y agosto

Hola a todos y bienvenidos un día más. ¡Ya estoy de vuelta! Estos días he desconectado, he exprimido el verano y he recargado las pilas.

Este verano ha sido bueno. He salido tempranito, he salido por la noche, he ido a la playa, al campo, al río, a pasear por la ciudad, a conciertos, a terrazas, a contar estrellas...He estado con personas queridas, he visto puestas de sol, mamás jabalíes con sus jabatitos, corzos. Me he escapado y he vuelto,he leído. Y lo mejor es que me he relajado y no he estado pendiente del reloj.

Pero los días pasan y ya esto aquí, contenta porque me apetecía volver con mi sección favorita, mi muleta en los malos momentos, la que me demuestra que siempre hay algo bueno. Os recuerdo que las fotos las hago yo, no las edito porque quiero guardar el momento tal cual y las hago en el mes que indico en el post, esta vez en julio y agosto. Y ya sin más rollo, empezamos.

Este verano, como ya he dicho, ha sido muy variado. Algunos días salimos a caminar por mi sitio favorito para volar cometas, por mi rincón con olor a sal y recuerdos en el aire. Y paseamos con el mar a nuestros pies.



Otras veces nos fuimos a la montaña, y aunque la niebla nos hacía creer que estábamos en Mordor, en realidad ese lugar era un paraíso.



También nos escapamos a otras ciudades, a conocer sus parques.



Y sus esculturas, porque nos gusta Úrculo, nos gustan los libros y siempre está bien homenajear a Emilio Alarcos, que algunos conceptos como la sintáxis o hablar bien(que lo resume todo), no deberían morir.



Y en nuestras caminatas encontramos flores llenas de pasión.



He leído que en Asturias tuvimos un noverano. Pues yo debo vivir en una realidad paralela, porque yo sí ha tenido verano. Junio ha sido variado, pero hasta finales no es verano así qu eno cuenta. Para mí agosto ha sido espléndido, y julio ha alternado los días veraniegos con instantes nublados llenos de encanto, que aprovechamos para hacer otros planes, por ejemplo ir al parque. No nos hemos aburrido ni un día.



Otras veces nos fuimos a la playa, a dejar el día pasar, sin más.



En otras ocasiones nos empapamos del Prerrománico Asturiano, porque aunque lo haya visto muchas veces desde niña, sigo sintiendo la emoción al estar junto a semejante tesoro.



Las mañanas de domingo son perfectas si acaban en una terraza, con un martini para mí, una caña para mi marido y un buen cuenco de agua para los peluditos.



Pasear por la noche ha sido un lujo. Unos días era en pareja, otros con hijos, otros con amigos, otros con hijos y amigos de los hijos...a veces nos íbamos al centro de la ciudad...



...Y otras veces charlábamos con los serenos, que siempre os llaman la atención.



La Semana Negra es uno de mis eventos preferidos. Este año asistimos a la conferencia de Juan Madrid, un autor que me encanta desde los 12 o 13 años. Podría pasarme horas y horas escuchando.



Algunos días nos fuimos al barrio alto a buscar rincones con encanto.



Y otros a sitios más "perrunos" para correr, saltar y pasarlo bien.



El mar ha estado presente a diario, a veces tarde, a veces temprano...pero siempre ha estado.



Y las zonas emblemáticas de la ciudad no podían faltar. A las ocho de la mañana hay una luz espectacular.



Y volvemos a salir de noche, a buscar fuentes cantarinas.



O vemos puestas de sol increíbles, acompañados de nuestros silencios, que nunca son incómodos, y de una cervecita fría.



Cuando compartí esta foto en redes sociales os llamó mucho la atención. No hay retoques, este gallo es así de negro.



Pasear al alba nos regala instantes como este.



Uno de mis lugares favoritos es "El Humedal". Está tan cerca y tiene tanto encanto...



Las mañanas con una bici bonita son siempre mejores.



Y la playa vacía, tan solo con los surfistas y los bañistas de siempre es una delicia.



Los días nublados hacen que el carrusel parezca más brillante.



Y los días de sol son mejores si podemos perder la vista en lugares increíblemente hermosos.



¡Qué bonito es sentir que tenemos la ciudad a nuestros pies!



Agosto es el mes de las moras, el saúco y también de los arándanos. Los frutos del bosque relucen con todo su esplendor.



¿Buscamos un rincón para leer? Podemos hacerlo solos, o en pareja, o con nuestros perros. De cualquier forma estará bien.



Y qué placentero es caminar acompañados del susurro del río.



También es maravilloso sentir esos primeros rayos de sol calentando nuestras caras, con la hierba alta, mecida por el viento cálido, a nuestro alrededor.



El verano se va deslizando y nosotros volvemos a esos lugares que nos encantan, con el mar acompañando nuestros pasos.



Ahora llega septiembre. El mes de los principios. El de las nueces, los higos, las manzanas, las avellanas y las últimas moras. El del olor a libros de texto y los últimos baños de mar. El de los reencuentros y las despedidas. El que dice adiós al verano pero nos sigue regalando noches largas y cálidas, paisajes llenos de color y muchas ganas de hacer cosas. Espero que sea tan bueno como han sido julio y agosto.

Muchas gracias por leerme, estoy feliz de estar de nuevo por aquí y nos vemos el jueves para reflexionar un poco.

Muy feliz semana a todos.