Como muchas de vosotras ya sabéis, en invierno muero por un poco de color y más en días tan grises como en los que hemos estado sumidos en el último mes en los que prácticamente ni me apetecía salir de la cama. Me nos mal que ayer el sol volvió a brillar con fuerza...
Precisamente fue en enero cuando, ojeando una revista, vi un abrigo muy similar a este que hoy os enseño (por no decir idéntico) de Zara y, como últimamente parece que me ha dado por colores tan poderosos y llamativos como el naranja vitaminado, decidí encargar este modelo con capucha, mezcla de lana y poliester, de la tienda de moda online Sheinside, aprovechando que, al ser de tela finita, me podría valer también de cara a la primavera si me abrigaba menos por debajo y dando por supuesto que, ya que el naranja había conquistado el invierno, también sería protagonista en la nueva estación del año con propuestas cargadas de energía y vitalidad, pero sobre todo, con mucho estilo.
La combinación de naranja y azul me parece un combo espectacular. No obstante, las posibilidades de mezcla son infinitas.
El viernes prometo enseñaros el jersey con todo lujo de detalles porque creo que de por sí, se merece un post aparte.
Y vosotras,
¿creéis eso que algunos gurús de la moda dicen de que el naranja es el nuevo negro?
Abrigo: Sheinside/Aquí.
Jersey: Sheinside/Aquí.
Vaqueros: Stradivarius/Old.
Botas: Pepe Jeans/Old.
Guantes: Los Telares/Old.
Hairstyle: Sara Ruesga Peluquería/Aquí.
Por cierto, como cada vez sois más las que me preguntáis cómo cuido mi piel, os diré que (pese a que en las imágenes salga algo enrojecida del frío), nunca la he tenido tan bella ni me he sentido mejor con ella. El secreto se llama Verónica Guerra. Hace unos tres meses decidí ponerme bajo sus manos expertas para corregir unas pequeñas manchitas faciales que me habían salido el verano pasado en labio superior y nariz provocadas por la sobreexposición solar, unificar el cutis y, de paso, cerrar los poros y, desde entonces, acudo puntual a mi cita cada mensualidad para una nueva sesión de mantenimiento, personalizada en función de las exigencias de mi tez en ese momento y los objetivos de belleza que hayamos definido, pues, por ejemplo, mi cutis es graso y, en determinados periodos del año, con tendencia acnéica.
Las que me seguís a través de las RRSS, sabréis que precisamente anteayer estuve haciéndome el tratamiento HIDRADERMIE "Doble Ionización" de GUINOT; el método estrella para embellecer todas las pieles, proporcionándoles el resplandor que necesitan para que parezcan más jóvenes. La doble ionización aumenta la eficacia estética del tratamiento obteniéndose un 52,3% más de hidratación, un 88,9% menos de grasa, un 49,7% menos de arrugas y un 75,9% de nutrición. En definitiva: conseguimos una piel más hidratada, más flexible y más confortable.
Para completar la "cura de belleza", combinamos la Hidradermie con el PEELING ÁCIDO MANDELICO, con propiedades blanqueantes, que unifican y aclaran el tono de la piel y exfoliantes, que favorecen la eliminación de las capas superficiales de la dermis y delicioso masaje como broche final para irme de allí descansada y serena.
Este mes me he llevado a casa además la CREMA tratante BEAUTÉ NEUVE para una renovación celular completa, gracias a la penetración instantánea de los magníficos ácidos suaves de frutas.
Con efecto peeling visible, su fórmula alisa y afina la textura de la piel y favorece la síntesis del colágeno, recobrando una piel nueva, más suave y resplandeciente de belleza.