El equipo italiano, Ferrari, envió una carta a la FIA en enero, en la que exponía su "preocupación" por la interpretación del reglamento, señalando sus sospechas que apuntan al equipo Mercedes y Red Bull, como portatodes de suspensiones activas, y por lo tanto, ilegales. El órgano rector del automovilismo prometió tomar una decisión al respecto, y ahota, a pocos días del inicio del GP de Australia, ha decidido prohibir la suspensión de los rivales más fuertes de la Scuderia.
Ferrari ha ganado su primer asalto, cuando la FIA le tomó la palabra, comenzó a inspeccionar las suspensiones de todos los rivales, poniendo especial atención en las de Red Bull y Mercedes; al final de dicha investigación, la comisión delegada determinó que las suspensiones de los conjuntos mencionados, favorecen ilegalmente la aerodinámica de los monoplazas, por lo que deben ser desmontadas.
Asimismo, el director de carrera, Charlie Whiting, no espera protestas en Australia. "No está permitido tener un sistema de suspensiones que afecta al rendimiento aerodinámico del coche de cualquier otra manera que no sea accidental. Queríamos ver si la suspensión generalmente hace de suspensión o si está diseñada predominantemente para el rendimiento aerodinámico del coche. Este es el cambio. No hemos centrado mucho más en esto este año".
"Si un sistema de suspensión se comporta de manera asimétrica, entonces no hay una razón suficientemente justificable como para comportarse de esa manera: que un sistema de suspensión baja a una velocidad y suba en otra. Si no son capaces de convencernos, entonces no pueden usarlos", argumentó Whiting en su rueda de prensa del GP de Australia.
Pero no todos los equipos han sido inspeccionados, aún quedan 4 suspensiones por revisar, dicha investigación será llavada a cabo durante los entrenamientos libres, y se dice que McLaren puede tener un diseño similar al de Red Bull y Mercedes, por lo que también pueden verse afectados.
Por último, el equipo Red Bull también puso su grano de arena para quitar a Mercedes del trono, acusandolo de quemar aceite durante las clasificaciones del 2016, algo que puede darle algo de potencia adicional a las flechas plateadas, en pro de dicha protesta, Whiting afirmó que también estarán pendientes ante cualquiero comportamiento de este tipo.
Todos señalan a Mercedes, y al parecer, el conjunto alemán ha perdido parte de su ventaja para el GP de Australia.