Estrellas fugaces en San Lorenzo. Día 6. #Yeswecaninsummer
Aunque parezca mentira, se me agolpan los temas sobre que escribir, y aunque mi primera intención como tema de hoy era otro he decidido que como era el día de San Lorenzo tenía que escribir sobre uno de los grandes acontecimientos del verano, las estrellas fugaces de San Lorenzo, las también llamadas lagrimas de San Lorenzo o las Perseidas. Supongo que las conoceréis pues es uno de los temas preferido de los telediarios en estas fechas.
Parece ser que coincidiendo con los días cercanos a San Lorenzo, el día 10 de Agosto, se puede ver en los cielos una lluvia de estrellas, que curiosamente no son estrellas per se, sino meteoros.
Este año han dicho los astrónomos que los mejores días para verlas serán el 11 y el 12, aunque también dependerá del punto en el que nos encontremos y la hora.
Como decía, no son estrellas sino polvo y fragmentos de roca del cometa 109P/Swift-Tuttle. Este cometa, se acerca al sol cada 133 años y aunque la última vez que lo hizo fue en 1992, el polvo y las rocas han quedado en una nube que al ser atravesada por la tierra, cada año, hace que se desintegren al entrar en la atmósfera terrestre, creando estelas luminosas que se ven como una lluvia de estrellas.
Este año se calcula que el mejor momento para ver las estrellas fugaces será entre las 2 y las 6 de la mañana de la noche del 12 de Agosto. Dicen los astrónomos que se podrá ver hasta un meteoro por cada dos minutos, es decir entre 150 y 160 meteoros a la hora.
En mi familia, desde que tengo recuerdo, salimos la noche indicada al jardín, lejos de las luces del pueblo y de la casa y nos tumbamos para intentar ver alguna de los cientos de estrellas fugaces prometidas. Cuando éramos pequeños nos dejaban participar en el avistamiento” solo un ratito, pero con la edad hemos ido sofisticando el evento y ahora raro el año que no sacamos colchones y mantas para guarecernos del fresquito de la noche…. y los más mayores, hasta el gin tonic de rigor, con eso de darle más glamour al acto.
Es un momento del verano muy especial, pues aunque vemos más bien pocas estrellas, el ambiente que se genera es muy divertido, como de acampada. Y aunque solemos juntarnos un buen montón, entre niños y adultos, pues la costumbre se ha ido transmitiendo de generación en generación, reina la paz, la tranquilidad y la camaraderia. La verdad es que la noche estrellada invita a ello. Pero también es un momento de grandes risas tratando de encontrar las estrellas fugaces con más estela, que para que engañaros, cantidad de veces inventamos o confundimos con aviones y satélites que viajan por el firmamento, con gran regocijo de los más pequeños que nos siguen el juego entre carcajadas y sesudas explicaciones sobre nuestro error.
Estas noches de verano son deliciosas, como diría un buen amigo mío, por lo que las guardamos en nuestra memoria como tesoros que son.
Parece ser que este año tendremos que tumbarnos con los pies mirando al noroeste, y se aconseja buscar como referencia la constelación de Perseo o la de Pegaso (pulsa aqui para ver vídeo). Pues bien, no nos quedará otra que echar mano de las apps de los distintos móviles con los que contaremos.
Último consejo, hacer una lista de deseos porque entre una cosa y otra, seguro que si acabáis viendo alguna estrella fugaz (que así os lo deseo) no os da tiempo a pensarlo. Suerte!!!!
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