Sesión de reiki
¿En qué consiste una sesión de reiki? Las manos se colocan sobre determinadas partes del cuerpo y la energía fluye. Los efectos y beneficios de esta práctica son muchos: despierta las fuerzas internas de cada persona, equilibra sus centros energéticos y mejora las funciones metabólicas del cuerpo. Además, muchos practicantes aseguran que ayuda a curar el estrés, la ansiedad, las jaquecas, los dolores musculares, incluso alivia el dolor en enfermedades como el cáncer, el reuma y enfermedades crónicas.
Una sesión puede durar aproximadamente 45 minutos y el paciente permanece acostado en una camilla, descalzo y vestido. Durante la sesión se utiliza música suave y aromas como incienso o esencias (aromaterapia).
Pseudoterapia inventada por el budista japonés Mikao Usui
Hay tres niveles de reiki: el primero es para principiantes y se aprenden los conceptos básicos de esta terapia. En el segundo se aprende el uso de símbolos y la transmisión de energía a distancia. Ya en el tercero se aprende a realizar una cirugía psíquica, una técnica de sanción muy potente. Y es en el nivel Maestría cuando se estudia todo lo necesario para enseñar esta terapia a otras personas.
En caso de enfermedad, el reiki debe considerarse como una terapia complementaria de la medicina tradicional. Algunos terapeutas que la practican optan por no cobrar, pues entienden que lo suyo es un don y que nadie debería lucrarse por ello.
¿Conocías esta práctica de sanación por imposición de manos?