Alonso Berruguete fue un famoso escultor manierista español, quien desarrolló su trabajo durante el Alto Renacimiento, en el siglo XVI. Poco se conoce de la infancia de este reputado artista excepto que, en 1507 se mudó a Italia, donde recibió clases de pintura. Asimismo, en Florencia compartió experiencia con genios coetáneos como Leonardo da Vinci, Rafael Sanzio o Donatello.
Aprendió de ellos, basándose en sus obras. De hecho, llegó a ser considerado el enemigo de Miguel Ángel ya que solía imitar su trabajo. Un ejemplo de sus primeros encargos lo observamos en Florencia, concretamente en la prestigiosa Galería de los Uffizi. En ella se expone la pintura 'Salomé', realizada entre 1512 y 1516.
En 1918 regresa a España, donde perfecciona sus dotes artísticas en el ámbito eclesiástico, dedicándose a crear figuras para el culto cristiano. De este período sobresalen sus obras más representativas del manierismo, una corriente centrada en los patrones de belleza establecidos por los grandes maestros, alejándose cada vez más de este estilo para presentar personajes con formas exageradas y forzadas torsiones, próximas al escorzo.
Algunas muestras de ello lo apreciamos en las esculturas de 'El sacrificio de Isaac' o 'San Cristobal'. Igualmente, destaca sus retablos para la Capilla Real de Granada, donde se reposan los restos de los Reyes Católicos. También cabe mencionar las hermosas y minuciosas tallas elaboradas para la iglesia del monasterio de San Benito el Real.
Gran parte de este contenido era fabricado desde su taller ubicado en Valladolid, abandonándolo tan sólo para la realización de grandes proyectos, como la sillería de la Catedral de Toledo o el sepulcro del cardenal de Talavera de la Reina, también en Toledo.
¿Y tú, qué opinas de la obra de Alonso Berruguete? ¿Qué trabajo es el que más te gusta?
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