Ésta lámpara la vi, en casa de un familiar, éstas pasadas navidades... y reconozco que fue amor a primera vista.... me impresionó su funcionamiento, y la cantidad de colores que puede llegar a tener. No sólo éso, sino los ambientes que puede crear.
Es un modelo de segunda generación, que al parecer da un 50% más de luz que el primer modelo, pero dejando ésto aparte, ya que a primera vista, no parece tanta la diferencia ( la que vi en casa de mi familiar, era el primer modelo), os voy a hablar un poco de cómo funciona.
La LivingColors funciona gracias a 7 potentes LED de distintos colores y blancos, cuya luz se logra combinar de tal forma que adquieren la capacidad de mostrar una gama de hasta 16,7 millones de tonalidades. Increíble ¿no?
Se maneja con un sencillo mando a distancia, muy fácil de usar y encima táctil, a través del cual, puedes elegir, tanto la intensidad de la luz, cómo el color y la saturación del mismo.
La lámpara me permite, elegir en cada momento del día, un ambiente distinto, así como por la noche me gusta una luz de tonalidad verde, por la mañana, me gusta el morado muy tenue, un color que me transmite tranquilidad.
En definitiva, se trata de una de esas inversiones que se disfrutan de una manera "distinta", y que no me arrepiento de haberla comprado, y muy recomendable, para los amantes de la decoración o de aquellos que les guste disfrutar de algo distinto en su casa.