Yendo al grano, lo que vamos a encontrar en esta serie japonesa es algo nunca visto que coge elementos ya conocidos, una especie de Battle Royale apocalíptico futurista con pruebas estilo Saw, que conforme avanza la trama pierden relevancia para profundizar y desarrollar los personajes que se convertirán en los auténticos protagonistas. Tanto la duración de cada episodio, como la acumulación continua de intrigantes misterios, hacen que su visionado sea trepidante, y si bien los crueles juegos que aparecen no rebosan originalidad ni salpican demasiada sangre, resultan lo suficientemente adictivos como para querer seguir formando parte como espectadores, y desde una lejana y segura distancia, de este infernal y divertido "survival game".
Mi puntuación: 7/10