Los paquetes sospechosos enviados de Yemen a Chicago y que fueran interceptados en Gran Bretaña y Dubai, vuelven a poner sobre el tapete la amenaza terrorista y a extremar las medidas de seguridad en los aeropuertos.
Así, en virtud de las nuevas exigencias fijadas por las autoridades norteamericanas para todas las compañías aéreas, la aerolínea portuguesa TAP ha avisado a sus clientes que a partir del 1 de noviembre, se verá obligada a suministrar datos de los vuelos de y para Estados Unidos con 72 horas de anticipación.
El imperativo legal norteamericano, que incluye elementos de las reservas, son el nombre completo, el género y la fecha de nacimiento que deberán suministrar en el mismo momento de la reserva, todos los pasajeros que viajen de o para el territorio estadounidense.
Según ha comunicado TAP las transportadoras aéreas deben enviar estos datos a las autoridades norteamericanas, so pena de, si faltan los mismos, se vean forzadas a proceder a la cancelación de las reservas, aunque las facturas y billetes ya hayan sido emitidas.
Entre la seguridad y la privacidad se abre muchas veces una brecha que puede ocasionar molestias al pasajero.
Foto: Foreign office
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