Los vuelos largos son doblemente tediosos y cansadores para quienes deben viajar en clase turista pues carecen de los privilegios de la Business Class que goza de mayor comodidad por tener butacas amplias y espacio suficiente para descansar.
Ahora, y desarrollado por Air New Zealand, es posible lograr mayor confort y hasta dormir en una cama. El Skycouch (sofá aéreo), transforma una hilera de tres asientos en una cama anunciada como la primera cama-siesta y como la primera iniciativa para mejorar el confort de la clase turista tomada en los últimos 20 años.
Los apoyabrazos desaparecen y de esa manera se obtiene un colchón plano con espacio suficiente para que puedan estirarse dos adultos y cada asiento tiene una almohada que se pliega por debajo. Lógicamente, debe abonarse el importe de tres asientos juntos pero se obtiene un descuento por el tercero.
El sitio de viajes Skyscanner realizó una encuesta donde el 13% de las personas encuestadas no han manifestado disgusto por compartir el sofá aéreo con un extraño, el 73% se manifestó encantada de pagar un dinero extra por el Skycouch pero un 60,5% de estos dijo que sólo lo compartirían con su pareja, en tanto que un 25% manifestó su negativa a pagar extras.
Los resultados obtenidos sobre 500 personas demuestran que la innovación de Air New Zealand cubre una necesaria mejora en el confort de los vuelos de larga distancia.
Los directivos de la compañía consideran que esta novedosa manera de viajar podría ser inicio de una nueva manera de vincularse, pero han subrayado que el Skycouch no debe utilizarse para tener relaciones sexuales a bordo.
Foto: Jaunted