Me han convencido. Durante los próximos tres meses diré "vale", sin reservas. Cuando me ofrezcan una cerveza, una peli en ese día que huele a hierba mojada como sólo lo hace en verano, o una última copa con la que nos llegue el amanecer, cuando me pidan un beso, mi nombre, o quién sabe, hacer el amor en el mar... ¿Vale?
Vale.
La canción del largometraje también se merece un 10. Espero desgastarla este verano, porque todos mis "vale" sonarán como ella: Maïa Vidal.