Autora: Laura Esquivel
¿Sobre qué trata? Es un conjunto de recetas mezcladas con pequeñas anécdotas, remedios caseros y consejos que reflejan la vida hogareña y una gran cantidad de sentimientos que acercan a la autora y al lector.
En mi opinión... si lo lees, lo saboreas. Yo lo leí poco antes de comenzar el Blog y por eso lo tenía guardadito sin reseñar ¡y es una pena porque... me encanta! Es de los libros que no puedo prestar por miedo a que no me sean devueltos. A mí me parece una preciosidad, es más, me gustaría haber escrito algo parecido, cargado de emociones que te llegan al corazón a través del olfato, el gusto y el estómago.
Después de haber leído "Como agua para chocolate" o "El Diario de Tita" encontré este libro y me encantó, también lleva recetas que me encantaría probar algún día. Está escrito de forma que imaginas cómo la autora y tú compartís una mañana cocinando y entre ingredientes os vais confesando secretos y momentos mágicos. Me gusta porque es como la vida misma, en España somos muy dados a crear hogar alrededor de la comida, a festejar con las amistades comiendo e incluso cerramos tratos en restaurantes. La vida de cualquier familia o grupo de amigos se se hace íntima a través de la comida, de compartir juntos ese rato agradable y relajado que puede ser tanto cocinar como comer.
Yo creo que éso es precisamente lo que la autora quería transmitir y lo hace de una manera espectacular, puede ser que no a todo el mundo le guste porque al final pueden llegar a pensar que sólo es un libro con recetas pero quien ha escrito una libreta con sus recetas lo comprenderá, por ejemplo tras una celebración, con la tarta de cumpleaños favorita de tu hijo, esa infusión que lo cura todo que siempre te hacía tu abuela, el desayuno energético que tu madre te ha preparado tras una resaca o sencillamente, ese chocolate caliente con el ingrediente secreto que sólo conocéis tu mejor amiga y tú. Son momentos que compartes con alguien especial y que, para recordarlos, sólo tienes que entrar en la cocina y abrir los armarios.
Quizás sea que el lector debe poner un pedacito de su alma en este tipo de libros para disfrutarlos del todo. Si eres de ese tipo de personas que, como yo, pones tus emociones en cada receta, que todo lo que empiezas, lo haces con cariño y que tu momento preferido de la comida es cuando alguien reconoce la intención que le has puesto al cocinarlo ¡es tu libro!
¡Que aproveche! ^^
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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