Fucking Up: No dejes engañar!
Ante la oleada invasiva de una enorme y amplias e ingentes cantidades de supuestas ofertas laborales en portales de empleo de la nueva estafa de moda, me veo en la absoluta obligación de escribir una serie de post que pongan sobre aviso y sobre todo, dejen muy claro de qué carajo va toda esta mierda.
Hace ya tiempo, que como bien sabéis y como la inmensa mayoría de personas en este país, yo también me encuentro (lamentablemente) en una situación laboral precaria… (triste realidad del mercado laboral español). Esto me lleva cómo es lógico, a la búsqueda de todo tipo de ofertas que puedan ser de mi interés en la medida de lo posible. Si os digo que estoy inscrita al menos en 30 portales de empleo diferentes no exagero…
Internet, que tiene sus ventajas, también tiene sus peligros a la hora de buscar empleo “online”. Hace tiempo, que vengo encontrándome con ofertas un tanto llamativas (además de las empresas que engañan en sus anuncios ofreciendo un empleo que luego no se corresponde con la realidad), éstas (de las que hablaré en esta serie de post) son las que sin duda, mayormente han captado mi atención.
Ya sea por su insistencia, su forma de presentarlas, su modus operandi y por supuesto lo qué es y lo qué ofrece, y lo que es peor: lo que hace con las personas.
Sus señuelos llaman la atención, todo comienza con una oferta del tipo: ” se buscan especialistas en diversas áreas” como por ejemplo: marketing y comunicación, internet, salud, coaching, etc. “para proyectos de economía colaborativa” o “para proyecto relacionado con…” (normalmente temas de salud, bienestar, etc.) . Vale. Picas… envías tu candidatura y aquí empieza desde luego lo más inquietante… tarda cero coma cinco segundos en sonar el teléfono… son ellos claro, que te llaman para decirte que están muy interesados en conocerte y que quieren contarte de qué va su “proyecto”.
El misterio…
Una vez comienzan a hablar contigo por teléfono, la sarta de ambigüedades que salen por sus bocas no dejan claro absolutamente nada acerca de para qué carajo te están llamando…
No te dan prácticamente ningún tipo de explicación racional, lógica o concreta acerca de en qué consiste la oferta… se limitan sistemáticamente a decir que te lo tienen que explicar en persona, pero que se trata de un proyecto “para ayudar a las personas, una especie de bolsa colaborativa entre profesionales, etc.etc.” os aseguro que en cuestión de unos pocos minutos son capaces de soltar tanta ambigua mierda que empiezan a poner a prueba tu capacidad de ser paciente.
La conversación suele terminar con una invitación a una “reunión” donde explican quiénes son, qué hacen, etc. etc. Y por supuesto en medio de toda esta porquería te van soltando perlitas con las que te quedas realmente pensando: “esto es solamente para gente valiente” “no es un trabajo normal, aquí no te vamos a contratar ni a pagar una nómina” (ah! qué bien!, pero entonces qué clase de empresa son y qué clase de trabajo es este?) “si no tienes espíritu de superación mejor no vengas”, “esto es para quienes quieren cumplir sus sueños” “ayudamos a las personas a ser felices” y así hasta el infinito… Y es que han sabido muy cómo preparar su “discurso” y hacia dónde dirigirlo… utilizan todo tipo de lenguaje relacionado con el desarrollo espiritual y motivación personal como vía de manipulación masiva.
La experiencia de buscar empleo
Toda esta estratagema oscura parece funcionarles con normalidad, pero claro… eso será para incautos de autoestima floja y poca o ningunas luces en el extenuante trabajo de buscar trabajo. Hasta que dan con alguien como yo… y aquí te quiero ver palomita!
He llegado (lamentablemente) a ver tantas barbaridades en el tránsito de mi búsqueda laboral, que pocas cosas me sorprenden. De hecho esta gentuza incansable no me sorprende, pero han llegado a provocarme de tal manera con sus formas de joder a la gente que me veo en la obligación de hacer algo para contribuir a evitar que este engaño se siga perpetrando sin más y siga creciendo y campando a sus anchas sin nadie que lo informe.
De hecho me saca tanto de quicio que ni bien voy escribiendo este post me entra al mismo tiempo un retorcijón de rabia de sólo pensar en lo que hacen a la gente.
El verano pasado tuve la oportunidad de conocer a una serie de personas, que en una primera impresión, dan la sensación de ser personas estables, majas, con profesiones interesantes, e incluso hasta cultas e inteligentes. Esta gente que conocí a través de una oportunidad laboral inesperada (buena) fueron poco a poco intentando averiguar qué terreno pisaban conmigo… al poco tiempo lo que descubrí fue que estaban metidos en la poderosa secta multinivel de una compañía americana llamada “Amway”… vaya por dios!
No me dio el aliento para salir corriendo hacia el lado contrario… noté con el tiempo que repentinamente habían perdido todo su interés en mi. Un interés que al principio parecía profesional y hasta sano…
Los meses continuaron transcurriendo a la par que me iba encontrando con las mencionadas ofertas y cada vez que recibía una llamada notaba que todos (incluso aunque se anunciaran con distintos nombres) desembocan en la misma fanática familia: AMWAY.
Por mi profesión (que como bien sabéis por razones de protección de identidad no revelaré) soy bastante conocida dentro de un sector muy concreto… esto me lleva por otra parte a estudiar los movimientos de mis competidores para saber qué están haciendo y hacia dónde están enfocando sus intereses, todo con el sano fin de mejorar mis propias estrategias de “branding personal”. Esta acción me llevó a darme cuenta de algo muy muy grave: todos esos competidores de profesión (y digo competidores y no colegas, porque de colegas no tienen absolutamente nada, tema del que hablaré en otra serie de post) están metidos en el ajo… oh, oh!
No hay nada que haga más daño que un influencer para convencer incautos…
Aquí es donde comienza la preocupante influencia de esta mafia… saben muy bien a quiénes captar para cumplir con sus objetivos, y por esta razón buscan personas que tengan cierta reputación dentro de sus profesiones y cierta influencia en las RRSS para facilitar su labor de “captar incautos con el autoestima partida y sin fe en ellos mismos”…
No te pierdas cómo sigue esta historia en el siguiente post…
Fuente: este post proviene de Reinvention Work Tour, donde puedes consultar el contenido original.
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