Hace años hice un curso de cata de vino en mi pueblo que organizaba una vinoteca. Era la excusa perfecta para las tardes de los jueves. Cuando ya llevábamos unas semanas compartiendo vino, experiencias y risas,... estábamos deseando de que llegara la siete y media de la tarde del jueves para reunirnos con esa pequeña familia.
En una de esas catas probamos un Secua, un vino semidulce de uva Chardonnay, perfecto para un desayuno romántico, esos que son para llevarle a la cama a tu pareja. El maridaje perfecto para este vino, unos blinis con salmón. La única pareja que había en el curso éramos Juanlu y yo, así que desde ese día, cada tarde que nos reuníamos, me preguntaban que si me habían llevado el desayuno a la cama en el fin de semana, así que no le quedó más remedio que hacerlo.
Para ese desayuno se necesitó lo siguiente:
Bandeja.
Copas de cristal tipo champagne.
Platos.
Cuchillos.
Servilletas.
Paté de oca con membrillo.
Blinis pequeños.
Salmón ahumado.
Una botella de vino Secua de la Bodega Finca de la Estacada.Es una pena que no hiciera una foto, con la emoción se me olvidó.
Hace unas semanas, me encontré con una receta de Blinis de Miss Dahl, y recordé ese desayuno tan romántico. De hecho, ella lo prepara como desayuno en su programa Deliciosa Miss Dahl, en el Capítulo 1: Amor, inspirado en el romanticismo.
En esta ocasión, el desayuno, o más bien brunch, se lo preparé yo a Juanlu, pero esta vez sin vino.
Lo que necesité para este desayuno fue lo siguiente:
Blinis.
Revuelto de yema de huevo.
Salmón ahumado.
Platos de la tienda Casa.
Cubiertos de Ikea.
Vasos de Ikea.
Zumo de naranja.Fue un desayuno comida a las doce y media de la mañana muy rico, no tan romántico como el que él me preparó, pero nos gustó mucho.
Bon appètit!!!
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