Jerez de la Frontera, 2012. Rocío, una madre soltera y sin trabajo, no recibe ningún tipo de ayuda ni subsidio. Vive con a su hijo de ocho años en un piso cuyo alquiler no paga desde hace meses, de modo que el dueño la amenaza continuamente con echarla a la calle. Para hacer frente a los gastos de manutención y alquiler, realiza trabajos ocasionales mal pagados y vende en el top manta objetos encontrados.
Voy a intentar hacer esta crítica lo más honesto posible sin entrar en ningún tipo de ideologias politicas y sin decir ni calificar con ningún adjetivo, a algunos de los que yo considero responsables de esta debacle, que unos pocos dicen que ya forma parte del pasado...
Techo y comida tiene una cara, un rostro, un cuerpo, que quizás y seguro que miles de personas e incluso millones en España podrían sentirse identificados. Rocío es una muchacha joven de veintipocos años con aparencia de lo que solemos llamar vulgarmente Choni, sin apenas estudios, con un hijo de 8 años, una casa que lleva varios meses sin pagar y quizás lo más importante, sin trabajar desde hace 2 años y medio.
Desde los primeros planos se ve a una Natalia de Molina (después hablaré de ella más concretamente) sin ilusión, sin ganas, con un ambiente y una atmósfera de tristeza y frustración que nos llega a las primeras de cambio, por que desde el principio llegas a empatizar de lleno con ella. En varias ocasiones Rocio, intenta pedir al sistema ayudas o prestaciones no para pagar la casa, la luz o el agua, sino para poder comer, o como se ve algunas veces para que lo pueda hacer su hijo aunque ella se quede sin hacerlo. Durante la película podemos ver como la vida de Rocío está montada en una montaña rusa emocional, donde la podemos comparar al caramelo que te ponen encima de la mesa y antes de cogerlo te lo quitan quedándote babeando ante la posibilidad de haberlo adquirido, esa quizás sea una metáfora para describir la vida de Rocio en el transcurso de la película.
Por otra parte, pienso que el filme es honesto consigo mismo, a pesar de que unos y otros puedan decir ¿El chaval por qué tiene una consola? ¿No sería mejor venderla y así tener algo más de dinero para poder comer? o ¿Por qué no venden la televisión? y un largo etcétera, pero mi pregunta a esos individuos es la siguiente, ¿De verdad creen que todos lo hariamos? ¿En serio?, el hijo de Rocio tenía una simple Play Station 2, tenía una televisión de cubo de 14 pulgadas, ¿De verdad creen que si os vieráis en esa situación venderiáis todo?, por qué yo creo que no, y por eso la película es honesta, por que sino por qué no vendemos las sábanas, o el armario, o el frigorifico ¿no?, no seamos hipócritas y aceptemos que si no tenemos un minimo de distracción ante lo que esta pasando, en esta ocasión en la familia de Rocio, nos volveriamos locos, de hecho al fin y al cabo es lo que estaba (o está) pasando en España ¿no?, todos viendo como la selección española gana el mundial o la eurocopa empañando por completo el cristal tras el que se oculta la dificil situación nacional.
Para concluir decir que tenemos la suerte de tener a una joven promesa del cine español, ese cine tan odiado como amado, y es Natalia de Molina, que si alguien podía encarnar a Rocío esa era ella, y asi la academia lo ha reconocido con ese goya a la mejor actriz de este año. Recuerden los créditos finales de la película... 512 personas pierden cada dia su vivienda en 2012, la tasa de paro alcanza el 26%, 13 millones de personas se encuentran en riesgo de pobreza, se rescata a la banca con 100.000 millones de euros, ¿Y A TI, QUIÉN TE RESCATA?.
Por @zimmer1993
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