Aunque pienses que tu edificio no tiene ratones, puede que solo sea que no los has visto, ya que los ratones se cuelan en los edificios por medio de las pequeñas aberturas cuando todo esta oscuro y regresan a sus casas en los agujeros cuando regresa la luz. Esto hace que los ratones puedan entrar a tu garaje y subirse a los coches que están aparcados, lo que puede causar muchos daños en el coche ya que pueden masticar los cables o incluso pueden hacer nidos en las fundas de los asientos. Si tienes o crees que puedes tener este problema, lo mejor que puedes hacer es seguir leyendo los consejos que vamos a darte a continuación.
El primer paso para alejar a los ratones de los coches es no dejar ningún tipo de alimento dentro de ellos, ya que los ratones son capaces de oler a distancia la comida y la comienzan a buscar hasta que llegan al vehículo.
Si sabes por dónde están entrando los ratones, lo que debes hacer es sellar el agujero para que dejen de entrar. Este es un método de prevención y es la mejor forma para que no lleguen a tu coche.
Si no sabes si hay ratones pero lo sospechas y no encuentras el lugar por el cual están entrando, lo mejor que puedes hacer es poner trampas para ratones a lo largo de todo el garaje e incluso en el coche. Puedes optar por las trampas que matan directamente al ratón o por usar las que los dejan vivos para que después puedas liberarlos.
Si tienes la posibilidad de hacerlo, puedes construir una barrera alrededor del coche. Se pueden construir metales de aluminio y deben ser al menos de 30 centímetros de alto para que los ratones no puedan saltarla.
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